Guerra. Pasar el invierno: ¿la escalada en los precios del gas podría impactar en las tarifas?

La disparada en el precio del gas natural líquido (GNL) no se detiene, impulsada por la guerra entre Rusia y Ucrania, llegó a venderse a US$ 65 por MMBtu, este miércoles. Se trata de una cotización récord registrada durante las primeras horas del miércoles de los contratos a futuro para entrega en abril, celebrados en el Dutch TFF, punto de referencia global. Hacia final del día la cotización bajo, aunque mantuvo una suba de 37% respecto al martes. Por otro lado, en Japón, otra referencia del mercado internacional, el precio del gas se acercó a los US$ 39.

En igual sintonía los precios del petróleo siguen batiendo récords, el miércoles llegaron a superar los 113 dólares por barril. De conjunto, se retroalimenta el impuso sobre los precios globales de la energía que ya se encontraban en niveles históricamente elevados, sumando presión a la inflación global.

Podés leer: Precio récord: el petróleo se acerca a los 100 dólares empujado por la tensión entre Rusia y Ucrania

El encarecimiento del gas por la suba del precio internacional implica una mayor demanda de dólares que el Gobierno debe destinar a la compra de este bien. Mientras Guzmán intenta poner el gancho final al acuerdo con el FMI, satisfacer la demanda de gas que es mayor a medida que se acerca el invierno, aumenta la tensión cambiaria.

¿Por qué aumenta la demanda de gas en el país? En los últimos años con la llegada del frío se importa GNL, porque las cantidades producidas en el país no son suficientes. Estas compras ingresan al país por los puertos de Bahía Banca o Escobar, llegan en barcos y luego se someten al proceso de regasificación para luego inyectar el combustible al sistema local.

Según datos de publicados por IEASA (ex Enarsa) en 2021 se llegaron a importar 56 buques por un monto total de 1.096 millones de dólares, el precio promedio fue de US$ 8,33 por MMBtu.

IEASA tiene pocos días para definir la compra los 70 buques que necesita para pasar el invierno. La suba en las cantidades importadas respecto a 2021 responde a la menor cantidad proveniente de Bolivia que atraviesa una disminución en su producción, y a la sequía que afectó la generación hidroeléctrica.

La secretaría de Energía ya había calculado para este año el precio medio del GNL importado en U$S 25 el millón de BTU, incluyendo el costo de regasificación, el triple del promedio pagado en 2021. El especialista en temas energéticos Daniel Montamat estimaba en U$S 3.000 millones el rojo de la balanza energética argentina en 2022, una cuenta que deberán rehacer por las subas recientes.

Te puede interesar: Conflicto en Ucrania: cómo podría impactar en la economía argentina

Según informaba Nicolás Deza en el portal especializado Econo Journal “La empresa estatal IEASA aún no compró los 60 barcos de gas que precisa para los meses de frío. Iba a hacerlo justo cuando los precios del LNG saltaron hasta 55% en el mercado europeo. Rusia esta enviando más gas a Europa pero el mercado esta contagiado por la incertidumbre.”

Por el momento la suba de los precios del gas internacional responden a la creciente incertidumbre, y en menor cuantía a las existencias reales del gas. Mientras se desconoce el alcance real de las sanciones económicas sobre Rusia, y su efecto en las disponibilidades del gas, este encarecimiento podría tener un impacto en las tarifas domésticas. El FMI exige subas superiores al 40 % en las boletas de los servicios energéticos. Este jueves llegará al Congreso un acuerdo de ajuste y sometimiento, que confirmará este rumbo encareciendo la vida de millones. No pasar frío en invierno será un lujo bajo el cogobierno del FMI y el Frente de Todos.

Te puede interesar: Tras el discurso de Alberto en el Congreso, ¿qué pasará con las tarifas?