La comunidad Vuelta del Rio de Cushamen, Noroeste de la provincia de Chubut, denunció públicamente los ataques, arbitrariedades y robos que vienen sufriendo de parte de los terratenientes y sus matones parapoliciales, así como del brazo armado de una justicia que no dá respuesta a sus derechos.
Miércoles 3 de marzo de 2021 00:05
La comunidad mapuche-tehuelche Vuelta del Río, ha dado a conocer el pasado 28 de febrero, un comunicado público donde denuncian al inacción de la justicia ante las reiteradas denuncias que han presentado por los numerosos ataques que vienen recibiendo a manos de terratenientes locales como Benetton y la familia El Khazen, de bandas parapoliciales pagadas por éstos y de la Policía de Chubut.
Desde 2017, vienen sufriendo violentos procedimientos policiales, que incluyeron el robo de bienes, destrucción de corrales y alambrados, envenenamiento, tiroteo y arreo de animales a las estancias vecinas e incluso el incendio intencional de la casa de Gregoria Emilia Marinao que incluyó amenazas de muerte por parte de personas vinculadas a la familia El Khazen durante este último mes de febrero. La familia El Khazen viene denunciando a la familia Fermín desde 1999 por una supuesta usurpación de tierras que dicen ser de su propiedad. Por esa causa, y luego de un violento desalojo policial a miembros de la comunidad Vuelta del Río en 2006, fue apartado de la justicia el cuestionado juez Colabelli, vuelto a la función pública provincial hace algunos años.
Incendio de una vivienda en 2017. Foto: Diario El Chubut
Todos estos hechos fueron denunciados mediante presentación a la justicia federal de Esquél, a los juzgados provinciales de Lago Puelo, en comisarías y otras dependencias del Ministerio Público Fiscal como el juzgado de paz de El Maitén, desde septiembre de 2017 sin encontrar hasta ahora ningún tipo de respuesta. Algunas de las causas incluso fueron cerradas por la justicia aduciendo que la propia comunidad desistió de la querella, algo absolutamente falso.
Como denuncian los firmantes “Esto nos coloca en una grave situación de indefensión e inseguridad, lo que hace que nuestras familias no se sientan seguras ni protegidas por el Estado y las Instituciones que deberían ocuparse.”. Esta situación no ha hecho sino agravarse durante la pandemia, “ya que las instituciones que deberían atender nuestros reclamos ni siquiera atienden al público. Este estado de cosas viene siendo aprovechado por los terratenientes que tratan de expulsarnos de nuestras tierras y causarnos daños, ya que actúan con toda impunidad”.
En febrero último incluso, utilizando como excusa la rotura de alambrados durante las crudas nevadas del último invierno, desde la estancia Fitiruhil del grupo Benetton arrearon una gran cantidad de ganado perteneciente a varias familias de la comunidad que sólo en parte ha sido recuperado.
Arcioni arrojando alimentos desde un helicoptero junto a Massoni el pasado invierno. Foto: MejorInformado
Allí, en la zona de Vuelta del Río, fue donde este invierno frente a una de las peores nevadas en años que implicó la perdida de enormes majadas y otro ganado, Arcioni y su gabinete se mostraron tirando bolsones de alimento desde un helicóptero del ejército. Los bolsones destrozados al caer al suelo mostraba el desprecio de la casta política por los Huinilao, Calfupan, Huanquilef, Tranamil, Calfupan, Inalef, Huenchunao o Llancaqueo, que habitan aquellos territorios. “Aun cuando nuestras Comunidades y nuestro Pueblo son Preexistentes al Estado Argentino, parece que al Estado no le interesa para nada nuestras vidas, nuestros bienes, nuestra seguridad y nuestros derechos”, destacan en el comunicado.
Como dijéramos frente a los desalojos por tierra para vivir, se trata de una justicia “fuerte con lo débiles, y débil con los Benetton”, y no es casual. Este accionar sistemático de la justicia y su brazo armado al servicio de los terratenientes, expresa el carácter racista y de clase de una justicia al servicio de patrones como Benetton, que difícilmente una reforma administrativa como la que plantean hoy el Gobierno Nacional o la que anunció Arcioni pueden resolver.
Hoy en su discurso de apertura de sesiones en la Legislatura provincial, Arcioni hablo de que "una justicia que llega tarde no es justicia". ¿Qué queda entonces para los pueblos originarios que esperan hace 150 años una reparación por el arrebato de sus tierras y el genocidio por parte del Estado Nacional? ¿O para quienes, como hoy los asambleístas de Rawson, denunciaron en 2017 el espionaje a cargo del mismo fiscal Rivarola? ¿O para la familia de Santiago Maldonado y los miembros de la Lof Cushamen?
Desde el PTS FITU en Chubut el docente de la lista Marrón Martin Saez, destacó que "Arcioni habló de que la piedra de toque en la reforma de la justicia es la oralidad, pero nada dijo de cómo se eligen los jueces. En eso, habló de un acuerdo político entre los partidos mayoritarios. Nosotros decimos que la única posibilidad de democratizar un poder intocado por todos los gobiernos como es la justicia, es mediante la elección directa de los jueces por el voto popular. De lo contrario, seguirán siendo elegidos a dedo por los personeros del poder económico."