Creo que a estas alturas ya hemos leído hasta el cansancio noticias, estados, opiniones del Censo, para quienes nos interesa leer este tipo de cosas. Aunque debo reconocer que siempre será más interesante leer con quién se metió (en la connotación romántica y sexual de la palabra) el Brayatan (disculpen por la estigmatización del nombre, Brayatan si lees esto no es nada contra ti) del Reality o leer las 10 comidas que te transforman en Super Sayayin.
Viernes 21 de abril de 2017
Volviendo al tema estos relatos nos han hecho saber que la gran mayoría de las y los ciudadanos abrieron la puerta y trataron bien o muy bien a él o la censista. Cosa que me parece bastante buena (yo le ofrecí té, café, chocolates y cuanta cosa tenía en la casa a esa alma voluntariosa que con su esfuerzo permitió que me quedara en mí casa, calentito siguiendo las noticias). Nada que decir somos un gran país.
Pero dado a que este no es un estado buena onda o que carezca de algún mensaje (si quisiera entregar ese tipo de información pertenecería al equipo asesor de la Carolina Goic, o habría estado apoyando a Mayol en su manifestación fuera del SII). Hay algo que me horrorizo y aterrorizo, y fue como los medios, una vez más, sacaron provecho de la condición de minoría y desprotección de un grupo presente en nuestra sociedad, hablo de los “inmigrantes y desplazados”.
Sí amigos y amigas hay una diferenciación para aquellas personas que llegan a nuestro país. Inmigrantes son las personas “Que llega a un país o región diferente de su lugar de origen para establecerse en él, temporal o definitivamente” según la RAE.
Por otro lado, están los Desplazados “Que, a causa de guerras, revoluciones, hambrunas, etc., abandonan el lugar donde vive habitualmente”, también según la RAE. Ósea a Chile están llegando “Humanos” con diferentes historias de vida, sensibilidades y relatos.
Probablemente si decidieron decir adiós a su país fue porque buscaban algo mejor para ellos y para su familia, y dentro de la lógica del sacrificio del hacerse solo, aquí han debido “precarizar” al máximo su estilo de vida para lograr mandar las remesas a sus familias. Y de esto es lo que festinan los medios de comunicación, generan noticias con títulos rimbombantes, en donde no se da cuenta del fondo si no de lo superficial, de lo que el relato más paupérrimo puede dar cuenta (Así como el discurso de Piñera para lanzar su candidatura triste, pobre y trillada en contenido, Si Piñera sabemos que plagiaste a Trump y Bane, para de ser tan atorrante).
¿Pero qué es lo horrible y terrible? al igual que el discurso de Piñera, esa construcción de relato entendido como noticia tiene un eco en la gente y causa cosas, mueve pasiones y despierta sentimientos, así como la canción de Luis Fonsi, “Despacito”.
Uno de los sentimientos que despierta ese tipo de relatos es el Patriotismo más “atorrante” digno y al nivel de la foto con pelo en pecho de Gustavo Hasbún (por cierto cualquier cosa que diga Hasbún es atorrante), y esto se enmarca en dichos como: “lho vienen a quitar el trabaaajo”,”váyanse pa’ su país”, “son terrible hediondos”, “nos vienen a roar”, “primero hay que solucionar los problemas internos para luego recibir inmigrantes”, en fin una pila de reacciones que no son para ciudadanos de un país OCDE.
Claramente, aquello muestra un descontento y miedo de perder lo que se tiene, pero las preguntas que se debe realizar cualquier persona orgullosa de haberse bajado del árbol y de ser homínido son: ¿realmente ellos han venido a quitarnos el trabajo? ¿son realmente ellos los que saturan los hospitales? ¿son realmente ellos quienes están dependiendo del asistencialismo estatal? ¿es por culpa de ellos que SERVIU no me entrego la casa? ¿por ellos es que han bajado los sueldos?
Amigas y amigos no seamos aweonas y aweonaos. Sabemos que el SII no se querelló contra el caso Penta y Caval, sabemos que se condonó la deuda a Johnson’s, sabemos que se perdonó a la polar, sabemos que en este momento hay políticos legislado a favor de ellos y los grandes consorcios, sabemos que muchas empresas chilenas y extranjeras están evadiendo impuestos a través de las donaciones a la teletón y los resquicios legales que tiene la propia ley de donaciones, sabemos que los milicos desfalcaron al estado por un montón de plata y que Carabineros de Chile también, y esto en parte gracias a la ley reservada del Cobre.
Sabemos que Carolina Goic no va a ser presidenta, que Piñera quiere robarse lo que le faltó por robar, que Gustavo Hasbún es atorrante por sí solo. Y si sabemos todo esto porque caer en ese patriotismo tan pasado a raja, tan de Cristián Labbé.
El problema no son los amigos, vecinos, desconocidos inmigrantes o desplazados, el problema es otro, la falta de movilización, la flojera nos cala, el altanerismo, la televisión y todos sus productos.
Es ver que nos ponen el pie encima en el trabajo, en el banco, en el hospital, es ver que legislan para unos pocos y a espalda del pueblo y no hacer nada. El problema no son los que llegan, el problema somos los que estamos y no estamos haciendo nada para cambiar nuestra realidad.
Saludos Paz