Patricia Maldonado, un importante rostro televisivo que ha hecho que algunos olviden que la derecha siempre va estar tras los oscuros intereses de los empresarios, es decir, en contra de los derechos del pueblo trabajador.
Miércoles 26 de julio de 2017
Con amplia carrera artística Patricia Maldonado, quien ha sido cantante de boleros, animadora, empresaria y opinóloga, tiene una verdad que la acompaña siempre a todos lados y que por ningún momento ha querido negar: la de ser una ferviente partidaria de la dictadura militar.
“No, no, yo no soy de derecha, soy pinochetista (…) y voy a morir siendo pinochetista, les guste o no les guste”, así aclaraba en una conversación en Animal Nocturno cerca del 2008.
Durante la dictadura Patricia Maldonado fue una incansable militante del régimen liderado por Pinochet, más tarde para el plebiscito (1988), realizó material propagandístico para la campaña del "Sí" y con el final de la dictadura fue vetada de todos los espacios públicos por alrededor de diez años.
La televisión como parte de los cables o engranajes del espectáculo utiliza varias disciplinas artísticas, y el arte expresa las contradicciones de la época en la que estamos, pero siempre va existir un sector que pueda expresar mucho más que otro.
Los empresarios tienen todo a su favor para realizar cuanta empresa cultural quieran (series, matinales, concursos, etc), así dirigen la mayoría de los medios de comunicación, donde algunos artistas son más difundidos que otros según los márgenes del mercado. Dentro de esto, Patricia Maldonado, se ha convertido en una caricatura de derecha, al igual que el candidato presidencial Sebastián Piñera. En ambos casos la televisión eleva las otras características de su actuar, restándole importancia al contenido político de sus dichos, en el caso de la opinóloga, la hacen ver dueña de una personalidad fuerte, explosiva y directa, casi como si no midiera sus palabras, mientras ponen risas cada vez que habla sobre el dictador Pinochet. Y con Sebastián piñera , así como con muchos derechistas tipo Ossandon, los hacen parecer hilarantes, graciosos o simpáticos.
El arte en el capitalismo, tiene múltiples direcciones, pero una de ellas, es la de la promoción de los ideales conservadores de las clases dominantes, decir que se está favor de Pinochet, no es solo apoyar a una figura, significa apoyar la persecución de militantes de izquierda, el asesinato de miles de trabajadores, y en lo profundo significa estar en contra de todos los intereses del pueblo trabajador, protegiendo la propiedad privada, los sueldos de hambre y la existencia de medidas extremas que hagan la vida infinitamente más miserable.
