La hija del expresidente Fujimori aventaja por poco a Hernando de Soto en la pelea por el segundo lugar. El dirigente docente ya aseguro su lugar en la segunda vuelta, que se realiza en dos meses.
La Izquierda Diario @izquierdadiario
Lunes 12 de abril de 2021 20:21
Con más del 85% de actas procesadas por la ONPE (Oficina Nacional de Procesos Electorales), Pedro Castillo (de Perú Libre) se mantiene en el primer lugar con 18,579% de votos. En el segundo lugar se afirma Keiko Fujimori, hija del expresidente, con 13,197% y Hernando de Soto (Avanza País) baja a 12,105% de votos.
La disputa por el segundo lugar promete definirse en una fuerte disputa. Sin embargo, Keiko Fujimori, la hija del expresidente Alberto Fujimori - hoy preso por delitos de corrupción y por los asesinatos de los estudiantes de La Cantuta – pasaría junto a Castillo a la segunda vuelta si se confirman los datos del conteo rápido realizado por al empresa IPSOS.
Muy pegado a Keiko Fujimori y peleando por el segundo lugar se encontraría el ultra conservador Rafael López Aliaga del partido Renovación Popular y Hernando de Soto del partido Avanza País. El resto de los candidatos se encuentran más lejos, Yonhy Lescano de Acción Popular con un%. Ya sin ninguna posibilidad de disputar arriba, se encuentran Verónika Mendoza del centro izquierdista Juntos por el Perú o el ex militar Daniel Urresti de Podemos Perú.
Fragmentación parlamentaria
Los resultados de la elección volverán a reproducir un parlamento altamente fragmentado, lo cual, como mencionan los especialistas, dificultará la gestión del nuevo gobierno que surgirá de la segunda vuelta. A esta fragmentación parlamentaria, se sumará el alto descontento social que se vive en el país a raíz de la crisis económica y sanitaria, lo cual hace prever que la profunda crisis política, lejos de estabilizarse, se profundizará significativamente.
En ese marco de alta fragmentación, el nuevo periodo legislativo 2021-2026 estaría conformado por 11 grupos políticos diferentes. Dentro de los cuales destacan: 28 congresistas de Perú Libre (Pedro Castillo); 23 congresistas de Acción Popular (Lescano); 16 congresistas de Fuerza Popular (Keiko Fujimori); 14 congresistas de Alianza para el Progreso (Cesar Acuña); 11 congresistas de Renovación Popular (López Aliaga); 10 congresistas de Avanza País (Hernando De Soto); 8 congresistas de Juntos por el Perú (Verónika Mendoza); 5 congresistas de Victoria Nacional (George Forsyth); 5 congresistas de Somos Perú (Salaverry-Vizcarra); 4 congresistas del Partido Morado (Julio Guzmán-Sagasti).
¿Quién es Pedro Castillo y cómo llegó hasta aquí?
Pedro Castillo es docente de educación primaria en la región Cajamarca, y además es dirigente del sector mayoritario del magisterio peruano.
Como se recuerda, los docentes bajo su dirección llevaron adelante el 2017 una masiva y contundente huelga contra las políticas educativas del entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski y contra la burocracia sindical dirigida por el partido Patria Roja que controla los fondos de la instancia previsional de los maestros denominada Derrama Magisterial. Patria Roja en estas elecciones participó en el frente Juntos por el Perú dirigido por Verónika Mendoza.
Pedro Castillo, quien postuló por las filas del partido Perú Libre liderado por Vladimir Cerrón, hasta donde se conoce no sería orgánico de ese partido, al cual habría llegado como invitado por su condición de dirigente magisterial y líder de la gran huelga docente del 2017.
Su condición de dirigente nacional del magisterio, llevó a que los profesores de todo el país se convirtieran en el principal soporte organizativo de su campaña electoral, por eso y por el fuerte arraigo que tiene en las bases magisteriales, Castillo tuvo presencia en todo el país y ganó en la mayoría de las regiones, incluso en algunas regiones de la sierra logró resultados categóricos que superan el 50% de los votos. Cabe mencionar, por ejemplo, que, en regiones como Cusco, de donde es Verónika Mendoza, Castillo la superó considerablemente por más de 20% de diferencia, lo mismo ocurrió en Puno, donde derrotó a Yonhy Lescano quien es natural de esta región altiplánica.
Otra de las razones que habría llevado a su rápido ascenso electoral, tendría que ver con el gran descontento que existe por parte de un sector importante de la población hacia los partidos políticos y sus principales figuras públicas, lo cual hace parte de la profunda crisis orgánica que se vive en el país. En ese entender, Castillo es percibido como un luchador social y como una figura por fuera de los partidos y los políticos tradicionales, a los cuales se los asocia muy fácilmente con los poderes de turno y con la corrupción.
Castillo se asume de izquierda y Perú Libre reivindica al gobierno de Maduro y de Evo Morales, en ese entender, su propuesta programática y su estrategia política no rompe con el capitalismo planteando algunas reformas al modelo neoliberal, además, Perú Libre reproduce posturas reaccionarias en materia de derechos democráticos para las mujeres, los migrantes y la disidencia sexual.
A pesar de todo ello, en corto tiempo, Castillo ha desplazado a Verónika Mendoza del liderazgo dentro del campo de la izquierda peruana y esto tal vez tenga que ver con que Mendoza y los partidos que componen el frente Juntos por el Perú, apoyaron directa e indirectamente a los gobiernos de PPK, Vizcarra y Sagasti aduciendo la defensa de la institucionalidad y la democracia. Ello los llevó a ser los grandes ausentes en las diferentes luchas obreras y populares que se empezaron a desarrollar desde el 2017. Por ejemplo, en la gran huelga docente de ese año, Verónika Mendoza y los partidos de su frente apoyaron abiertamente a Kuczynski y se pusieron de espaldas a los docentes, lo mismo ocurrió con las contundentes huelgas de los trabajadores mineros del sur.
Las perspectivas para la segunda vuelta
Si bien es cierto, la gran sorpresa en esta primera vuelta fue el triunfo de Pedro Castillo, no podemos dejar de mencionar los altos índices de voto nulo, blanco y el ausentismo. Todo esto hace parte del descrédito en el régimen político. Incluso el triunfo de última hora de Castillo hace parte del rechazo al estatus quo, ya que representa en el terreno electoral un golpe a lo que un sector de la población considera como los partidos y los políticos tradicionales, a los cuales responsabilizan de la crisis en curso.
Con la segunda vuelta se abrirá una nueva etapa, que estará condicionada fundamentalmente por quien acompañe a Castillo. Si pasa Keiko (que es lo más probable), quien por cierto goza de un alto anti voto y un alto desprestigio, esto podría facilitar la posibilidad de que se constituya de manera inercial un gran frente contra ella, lo cual abona las posibilidades de victoria de Castillo como pasó con Ollanta y PPK.
Frente a este escenario, Keiko Fujimori seguramente apelará a una campaña basada en el miedo y en la supuesta lucha contra el terrorismo, mientras que los grupos de poder económico, a través los medios de comunicación, tratarán de presionar en los próximos días a Castillo para que este reduzca aún más sus propuestas de campaña, las cuales, a pesar de ser limitadas, le son incómodas a la burguesía, como por ejemplo la demanda por cambiar la constitución.
Si pasa Hernando de Soto u otro personaje distinto a la Fujimori, lo más probable es que la burguesía arremeta con todo contra Castillo hasta liquidarlo mediáticamente.