El Estado español vacunará la mitad de la población pero rechaza la supresión de las patentes que permitiría al resto del mundo acceder a las vacunas más económicamente.
Lunes 23 de noviembre de 2020 23:09
El presidente español anuncia que la mitad de los españoles estarían vacunados contra el Covid-19 a lo largo del primer semestre del próximo año. Los avances en la investigación hechos por los laboratorios hacen pensar que a final de este año o principios del próximo ya se empezaría a distribuir las nuevas vacunas.
Según Pedro Sánchez la Comisión Europea ha pactado con cinco laboratorios para tener 1.200 millones de dosis, de las cuales el 10% pertenecen en el Estado español. En total, las vacunas que llegarían serían de 4 dosis por persona y permitirían que el primer semestre tener vacunadas a la mitad de la población.
El anuncio del Presidente ha desbordado optimismo dejando frases sorprendentes. Por ejemplo, que la cogobernanza “está funcionando en esta segunda ola” cuando casi todas las comunidades están con un riesgo muy alto; o que “La capacidad del sistema nacional de salud es excelente...” cuando hay una carencia sustancial de personal sanitario y la movilidad está muy reducida al igual que la vida social.
En su anuncio, el Presidente ha dejado caer “Una cosa es la vacuna y otra la vacunación”. Aclarando que la vacunación tardará unos meses y que primero se vacunará en la población de riesgo y el personal sanitario. Teniendo en cuenta que los Centros de Atención Primaria (CAP) se encuentran casi colapsados y que el contagio del Covid está bajando lentamente la campaña de vacunación será bastante dificultosa.
Defendiendo el negocio del Covid-19
No obstante las buenas noticias sobre la llegada de las vacunas y la campaña de la vacunación, el Gobierno del PSOE-UP apoya a la UE, EE. UU. y Japón contra la exención de las patentes vinculadas a las vacunas del Covid. Toda una medida imperialista que se efectuó dentro de las jornadas organizadas por la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la discusión continuará el próximo 17 de diciembre.
India y Sudáfrica han propuesto este viernes que no se apliquen las patentes para poder acceder a la vacuna más rápidamente y con menos coste. Pero esta iniciativa se chocó con la defensa enconada que las grandes potencias hacen de las ganancias de sus laboratorios. Ahora se entiende la frase de Pedro Sánchez “Una cosa es la vacuna y otra la vacunación”.
Se ve que a este gobierno, “el más progresista de la historia”, tanto le da si los países más pobres tienen acceso a la vacuna o si se tienen que endeudar todavía más para poder conseguirla. ¿Será éste, uno de los “sapos” que según Pablo Iglesias nos tendríamos que tragar?
Vivimos bajo el sistema capitalista, y todo lo que sea capaz de ser vendido lo será. Los laboratorios y grandes empresas farmacéuticas quieren hacer su agosto teniendo en cuenta las necesidades de decenas de millones de seres humanos. Se ve que “acabar con la Covid” no es un buen negocio, mejor que continúe y así podrán vender muchas vacunas en los próximos años.
Acabar con el Covid, no será cosa de un país o un continente. Solo se podrá acabar con una acción coordinada y planificada de todos los países del mundo. Pero las potencias imperialistas solo defienden las ganancias de sus empresas. Y el “gobierno de progreso” hace lo mismo. Ya os podréis imaginar qué mitad será la primera en estar vacunada en el Estado español imperialista.
Esta forma de “luchar” contra el Covid nos condenará a que el Covid sea un virus que provoque enfermedades crónicas. Que nunca deje de estar entre nosotros. Que tengamos varias olas más y que los sectores más empobrecidos sufran más las muertes y los contagios. Así como ahora para viajar en la África nos tenemos que vacunar para evitar algunas enfermedades crónicas que se pueden evitar, pasará con el Covid bajo el sistema capitalista y sus gobiernos imperialistas.
