Al intentar documentar “La vie en Rose” de Angélica Rivera en París, el periodista Francisco Cobos fue retenido y acosado por dos hombres que se identificaron como miembros del Estado Mayor Presidencial. Los caprichos de Angélica Rivera, es tan solo una muestra de la banalidad, el derroche y la corrupción del gobierno de Enrique Peña Nieto.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Martes 7 de agosto de 2018
Este lunes, el periodista subió un video a su cuenta de Facebook, captado el domingo alrededor de las 3 de la tarde, en el que explica lo ocurrido. “Me voy a acercar a ver qué es lo que pasa”, anuncia en el video, donde señala que intentaba documentar la presencia de la esposa del presidente Enrique Peña Nieto en la capital francesa.
El video se interrumpe y posteriormente el periodista denuncia que dos personas le impidieron acercarse y lo obligaron a borrar las imágenes que había obtenido hasta ese momento. Buscaron arrebatarle el teléfono y llevarlo detenido.
En la entrevista para la revista Proceso, Cobos identificó a uno de los escoltas de Rivera, que en el video se distingue de camisa azul, quien dijo que era teniente del Ejército Mexicano, adscrito al Estado Mayor Presidencial, y fue el más agresivo.
Francisco Cobos, reportero en el noreste mexicano y Texas, actualmente corresponsal de la cadena Univisión en Monterrey, Nuevo León, aseguró que las personas que lo hostigaron por intentar documentar le pidieron identificarse y borrar el video. Ante esto, su hija de 15 años grabó a escondidas el momento de la llegada de los guardias a su padre y tener un registro de los sucedido. Después del incidente, donde le impidieron ejercer como periodista, Cobos aseguró que los siguieron por varias cuadras.
A lo largo del sexenio, la familia presidencial y particularmente Angélica Rivera ha sido protgonista de numerosos escándalos por los viajes internacionales, compras en prestigiadas tiendas del extranjero en Las Vegas y Dubai, así como por visitas a lugares que frecuenta el jet set internacional, como Australia, entre otros. Dentro de los escándalos más conocidos y que generaron una ola de repudio a nivel nacional e internacional esta la famosa “casa blanca” valuada en 80 millones de pesos de la empresa constructora Higa, y cuyo propietario figuró Juan Armando Hinojosa.
