Autoritarismo. Personal de la alcaldía Cuauhtémoc agrade a peatón

El pasado 25 de enero mientras Sandrá Cuevas, alcaldesa de Cuauhtémoc, realizaba un recorrido por la lateral de Av. Reforma, tres elementos de su personal golpearon a un peatón que se aproximó al vehículo.

Sobre el suceso se presentaron dos versiones. La primera fue la del agredido, que recurrió a redes sociales para denunciar el hecho. Se identificó como Roberto Noricumbo y relata que mientras caminaba por Reforma en compañía de su perrito, vio a la alcaldesa a bordo de su vehículo RZR, que usa para encabezar el Operativo Diamante Remasterizado, e intentó saludarla. Como respuesta, tres de los hombres de Cuevas comenzaron a agredirlo físicamente.

En redes sociales circula un video en donde se ve a la alcaldesa señalar al hombre y posteriormente a sus hombres bajando de los vehículos para comenzar la agresión.

Noricumbo ya realizó la denuncia legal correspondiente y ante la CNDH para proceder por abuso de autoridad.

Por su lado, la alcaldesa tuvo que salir a dar una explicación sobre lo sucedido, argumentando que los motivos de la respuesta de su personal se debieron a que Roberto amenazó de muerte a Cuevas y la siguió durante más de 50 m haciendo señas obscenas. Por lo que se sintió en peligro y por ello sus trabajadores “le dieron unos zapes” al peatón. Si bien reconoció que estuvo mal, también cuestionó qué tipo de protección tenía ella ante estas amenazas. Días después la alcaldesa interpuso una denuncia contra Roberto por violencia política contra las mujeres en razón de género.

Una más de Cuevas

El actuar de la alcaldesa de Cuauhtémoc no es sorpresivo, si revisamos toda su trayectoria política siempre se ha encontrado en medio de algún escándalo y acusaciones de abuso de poder. En febrero del 2022, personal de Cuevas retuvo contra su voluntad a dos policías y los mantuvo incomunicados hasta que fueron rescatados por otros policías.

La denuncia de Roberto se suma a las múltiples denuncias hechas en redes sociales sobre el abuso de autoridad de Sandra Cuevas. Desde que comenzaron sus operativos de limpieza social, ha quedado clara la violencia e impunidad con la que se maneja. Pero ¿por qué después de tantas denuncias, de obvias irregularidades y de reiteradas muestras de autoritarismo, Sandra Cuevas sigue en su puesto?

Las acciones de este tipo no son exclusivas de la alcaldesa de Cuauhtémoc, durante diferentes mandatos de diferentes partidos hemos sido testigos de esta clase de comportamientos que, por muy escandalosos que sean, parecen no tener una repercusión real en el poder político que mantienen estos personajes. Un ejemplo más de la clara impunidad que poseen.

Por ello no podemos confiar en que sean precisamente ellos los que nos ofrezcan una alternativa política. Principalmente cuando estos actos vienen de políticos que sistemáticamente violentan a las comunidades más vulnerables. Como lo hace Sandra Cuevas con su limpieza social, que trata de empalmar con la gentrificación que precisamente en la Cuauhtémoc se ha extendido enormemente.

Como parte de la lucha contra la explotación y la opresión, las y los trabajadores necesitamos representaciones políticas propias.

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