Todo el debate de la permisología y la aceleración de la tramitación de los proyectos es presión para que proyectos como este, de alto impacto ambiental y peligrosos para las comunidades, sean aprobados rápidamente, flexibilizando los requisitos, para hacer millonarios a un grupo minoritario impactando a una zona de valor internacional para la biodiversidad, como es toda la zona de Punta de Choros.
Martes 17 de diciembre de 2024
La aprobación del proyecto minero Dominga por parte del Tribunal Ambiental refleja el consenso empresarial de que el crecimiento económico se basa en la extracción de recursos naturales, a costa de la destrucción ambiental. Este caso afecta directamente al Archipiélago de Humboldt, un ecosistema de importancia internacional para la biodiversidad. Sin embargo, el fallo del tribunal no aborda el impacto ambiental del proyecto, a pesar de ello, otorga luz verde para que vuelva a ser evaluado por el Comité de Ministros. Además, se exige la inhabilitación de aquellos ministros que estén en contra del proyecto.
Lo que ha ocurrido es una evidente presión política de Andes Iron, que tiene sus representantes en la política tradicional. Empresa de los Delano, de Carlos Alberto, militante UDI, quienes fueron los financistas irregulares de la política. Que le pasaba facturas falsas a sus amigos de la derecha, como a Jovino Novoa y Pablo Zalaquett, integrantes de los llamados "chesee and wine".
Y Piñera está involucrado. Vendió en tres cuotas la empresa a su amigo Carlos Délano. Y el pago de la tercera cuota quedó sometido a que la zona donde se emplazaba el proyecto no fuese decretada zona de protección ambiental. Así es el Chile de los empresarios.
Hasta Hermosilla está involucrado en este proceso de implementar el proyecto Dominga, donde nuevamente vemos que el Estado capitalista está al servicio de los grandes empresarios, de garantizar sus negocios, como el caso Parque Capital, ya que en el celular de Luis Hermosilla quedó la huella que indica que, el mismo día en que el Ministerio Público anunció que iniciaría la investigación por la venta de Dominga, el entonces Presidente Piñera se habría reunido con el penalista que entonces figuraba como asesor legal de su Ministerio del Interior, como ya sabemos, mano derecha de Andrés Chadwick que actualmente también se encuentra procesado.
Lo de fondo es que el impacto ambiental de la minera en la zona: afectará a 560 especies, dentro de eso el 80% de los pingüinos de Humboldt en el mundo, que además afecta a las otras actividades de la zona como pesca artesanal, turismo y zonas protegidas.
Esta resolución no contraviene esos aspectos que son el fondo del problema, y sólo cuestiona el procedimiento, es decir, la parcialidad de los ministros.
En febrero de 2024, con el deceso del exmandatario, su eventual responsabilidad penal en este caso se extinguió, de hecho como favor fue totalmente sobreseído de cualquier responsabilidad e información.
Pero el parcial ha sido el Estado y la política tradicional, no hay que olvidar que Piñera cuando fue Presidente apostó por este proyecto para enriquecerse de forma personal.
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El fondo del problema es que hay un enorme impacto ambiental en la zona y un rechazo amplio de comunidades y organizaciones. Que ya han salido a movilizarse la jornada de este pasado Lunes con corte de ruta rechazando el fallo del tribunal medioambiental de Antofagasta.
Detrás un procedimiento administrativo se esconde el fondo del problema.
Todo el debate de la permisología y la aceleración de la tramitación de los proyectos es presión para que proyectos como este, de alto impacto ambiental y peligrosos para las comunidades, sean aprobados rápidamente, flexibilizando los requisitos, para hacer millonarios a un grupo minoritario impactando a una zona de valor internacional para la biodiversidad, como es toda la zona de Punta de Choros. Los empresarios hace años vienen insistiendo que el estancamiento del crecimiento en el país se debe a que el Estado de Chile no permite mayor permisología, por esto, a su vez apoyan una reforma política que sea aún más restrictiva y antidemocrática que permita mayor protagonismo de los partidos tradicionales, para así tener un parlamento aún más controlado y acorde a sus intereses.
Para frenar el proyecto, y la ofensividad empresarial que bajo el discurso del "progreso" terminan estafando a millones convirtiendo territorios completos en zonas de sacrificio, donde no solo dañan la biodiversidad, sino que también a cientos de miles de personas con enfermedades producidas de por la contaminación, para lo cual ya tenemos muchos ejemplos en Chile. Hay que seguir el camino de las y los pobladores y pescadores artesanales de La Higuera, quienes mostraron esta reacción organizada contra el proyecto Dominga, en este nuevo intento de volver a implementarlo. Pero es necesario ir más allá fortaleciendo la lucha entre pobladores, trabajadores y estudiantes, de manera totalmente independiente a los empresarios para proteger la biodiversidad de la zona, pero también la calidad de vida de cientos de miles, porque las vidas de trabajadores, pobladores y el conjunto de las comunidades valen mucho más que las ganancias empresariales.