Ante la ridiculización de demandas estudiantiles hace falta la visibilización de las exigencias de los estudiantes, quienes se exponen todos los días a la represión policial. Hoy revisamos el por qué de éstas y a qué se refieren
Sábado 20 de mayo de 2023
Desde la promulgación de la ley “gatillo fácil” y el día del carabinero, los estudiantes secundarios se han movilizado continuamente. Las demandas expuestas, principalmente, han sido las demandas históricas del movimiento secundario y en contra de la represión y persecución política.
Desde que la toma del Instituto Nacional publicó y difundió su petitorio, la prensa ha hecho de este una ridiculización de sus demandas, burlándose de la exigencia de baños plurigenéricos, menús veganos y las condiciones adecuadas de estudio para personas neurodivergentes, planteando que este tipo de demandas no eran necesidades reales.
Por lo cual en este artículo se expondrán los puntos que convergen en gran parte de los petitorios actuales de liceos y colegios de la región, el porqué de estos y su desarrollo. Particularmente de los petitorios de: Instituto Nacional, Liceo Jose Victorino Lastarria y el Liceo 7 de Providencia.
Entre los puntos que más se mencionan está la mejora de la infraestructura, una mejor salubridad, menú Junaeb y Educación sexual integral.
Estas demandas son bastante interesantes, comenzando por la primera, la infraestructura es algo que varía en cada establecimiento, pues todos se encuentran en situaciones particulares, pero el hecho que se repita en estos petitorios y que siempre ha sido tema en las demandas estudiantiles significa algo.
Pues se ve que hay poca inversión en los liceos, el Ministerio de educación el año pasado destinó 700 millones de pesos a colegios públicos y el mismo gobierno destina 1.500 millones de pesos todos los años a Carabineros.
Agregar también que lo que se invierte no se destina a cosas tan básicas que se mencionan en los petitorios, como la cantidad de baños necesarios y los insumos para éste o la cantidad suficiente de mesas y sillas en cada sala de clases para que estas estén en buenas condiciones.
En el segundo punto más exigido se encuentra una mejor salubridad, esto en la mayoría se refiere a una limpieza más frecuente de los espacios comunes, camarines y baños. Igual se entiende en este punto, algo más médico, como lo es la enfermería, pues se comenta que no existen los implementos suficientes para atender ciertas emergencias, y que en los establecimientos educacionales, si es que hay algún personal de salud, este solo es 1 persona, lo cual le demanda mucho trabajo.
El siguiente punto fue bastante criticado en ciertos medios de comunicación, pues bien, uno exige que la comida sea de mejor calidad, ya que en múltiples ocasiones se han difundido casos de comida que se encuentra en descomposición. Pero el factor en específico que ha sido criticado en estas movilizaciónes es la exigencia a que exista un menú vegano/vegetariano.
Y por último está la Educación Sexual Integral, esto es algo que el movimiento estudiantil ha tomado como demanda hace mucho tiempo, y que se sigue planteando, durante esta clase se tratarán varios temas, entre ellos métodos anticonceptivos, autonomía progresiva, consentimiento, respeto, diversidad sexual e identidad de género; y para el cumplimiento de esto se pide que profesionales del tema puedan enseñar esto. Algunos petitorios lo exigen como talleres y otros que sea parte de la malla curricular.
Estas demandas consideramos que son cosas básicas que los establecimientos tienen que cumplir, pues la mayoría son demandas históricas, y que al día de hoy no se han cumplido.
Luego hay un sin fin de demandas que se expusieron, entre éstas las más llamativas son: Respeto a las instancias organizativas del establecimiento, protocolos por violencia sexual, creación de protocolos en contra del Bullying, inclusividad a las diversidades sexuales.
Pero algo muy importante y muy contingente en el movimiento secundario es la demanda de derogación de aula segura y gatillo fácil, pues estos dos decretos son leyes sumamente represivas, lo cual ha sido utilizado para justificar ataques de carabineros sumamente repudiables.
Ésto va en la línea de la exigencia sobre el fin de la persecución política en los establecimientos, pues legitimar a que carabineros empleen su arma de servicio legítimamente. Pero algo extraño de este punto es que la mayoría de estas exigencias en los petitorios se pone en último plano, dando prioridad a otras demandas, siendo que esta constante persecución y represión movilizó aún más a los estudiantes, pero esta demanda no se toma tanto como los otros que en su mayoría son locales.
Éste tipo de demandas convergen en distintos petitorios, no es casualidad, son verdaderas necesidades de los estudiantes y que deben ser respondidas por los municipios y el Estado. Pues vemos cómo se gastan cientos de millones en la policía y el aparato represivo, y en la educación se gasta menos dinero, lo que no cumple con las necesidades de los estudiantes.
Matías López
Estudiante secundario. Militante de la agrupacion anticapitalista VENCER, Pan y Rosas y PTR.