Este miércoles, los petroleros que están en huelga desde el 31 de enero distribuyeron gas de cocina y nafta a precios reducidos. Con acciones como estas los trabajadores buscan ampliar el apoyo y visibilidad de la huelga, que enfrenta un enorme bloqueo mediático y represión estatal.
Miércoles 5 de febrero de 2020 12:53
Desde la madrugada del 31 de enero, los petroleros están en huelga. Más de 30 unidades de Petrobras están movilizadas. Los trabajadores luchan contra más de 1000 despidos producto del cierre de la Fábrica de Fertilizantes Nitrogenados (Fafen) de la sureña provincia de Paraná, y también contra la privatización.
En la mañana del miércoles los petroleros de Vitória, capital de la provincia de Espírito Santo, en el sudeste del país, distribuyeron cupones de descuento de dos reales en el litro de nafta. Los trabajadores afirmaron que están en contra de la política de precios aplicada actualmente por Petrobras, y que con esta acción buscan mostrar que es posible aplicar valores más reducidos. La acción ocurrió en Reta da Penha, frente al edificio de Petrobras y distribuye 100 cupones de descuento.
En Araucaria, región metropolitana de Curitiba, capital de Paraná, los petroleros venderán este mediodía 300 garrafas de gas de cocina a 40 reales en la plaza da Biblia, frente a la Legislatura de Araucaria.
En Canoas, Rio Grande do Sul, los trabajadores de la refinería Alberto Pasqualini anunciaron que venderán 100 garrafas de gás de cocina a 40 reales a partir de la 16 horas en el barrio João de Barro, cercano a la junta de vecinos.
Con estas acciones, los trabajadores buscan criticar la política de precios de Petrobras y demostrar la posibilidad de aplicar valores justos, a diferencia de lo que ocurre actualmente. Demuestran también, aun simbólicamente, la capacidad de los trabajadores de dar respuesta a las demandas profundas de la sociedad. Estas acciones remiten a la reciente lucha de los trabajadores franceses, cuando los trabajadores de la electricidad cortaron la luz de los ricos y reconectaron a los barrios pobre. Estas acciones ocurrieron en medio de una enorme huelga de transportes que duró más de 50 días, en una enorme batalla contra el Gobierno y también contra la burocracia sindical que actuó como freno a los trabajadores.
En Brasil estas acciones demuestran la fuerza de la huelga de petroleros, que es una primera batalla nacional de este sector estratégico contra el Gobierno de Bolsonaro. Es urgente rodear de solidaridad a los trabajadores en lucha. Las centrales sindicales, como la CUT y la CTB, así como los sindicatos y organizaciones estudiantiles como la UNE, además de las federaciones estudiantiles y centros de estudiantes deben impulsar acciones de solidaridad con la huelga y ayudar a perforar el bloqueo mediático que la prensa capitalista viene haciendo para aislar a los trabajadores. Los parlamentarios de la izquierda como el PSOL deben utilizar todo su alcance mediático para dar visibilidad y generar solidaridad con los petroleros.