En el día de hoy tendrá lugar la primera sesión del año del Consejo Superior de la UBA, en el marco de la reciente noticia sobre la licencia otorgada al Vicerrector Darío Richarte. Personalidades y organismos de derechos humanos se suman a la campaña, mientras la Facultad de Sociales exige su remoción definitiva.
Miércoles 11 de marzo de 2015
Al haber sido decidida la licencia mediante una resolución “ad referéndum” por parte del Rector Barbieri y el Secretario de Hacienda Emiliano Yacobitti, no será sometida a discusión de los consejeros superiores. Sin embargo Centros de Estudiantes, el Consejo Directivo de la Fac. Sociales y organismos de derechos humanos van a exigir que se trate en la sesión la remoción irreversible de Richarte de su cargo en la UBA y realizar una conferencia de prensa.
La noticia de esta licencia se asoció inmediatamente con la repercusión que se está generando alrededor del destape de relaciones entre Richarte y actuales miembros jerárquicos de la Secretaria de Inteligencia, como Stiuso. La semana pasada analizábamos aquíalgunas de las hipótesis que se abrían sobre la decisión de apartarse momentáneamente de su cargo en la UBA, y esta semana se corroboró la baja de las cátedras que iba a dictar en la Facultad de Derecho donde es profesor.
Frente a esta situación, la denuncia por las vinculaciones del vicerrector con los servicios de inteligencia empieza a incomodar los despachos de la UBA.
En el día martes el Consejo Directivo de la Facultad de Sociales votó por mayoría la propuesta de la Consejera estudiantil Cecilia Mancuso de la Juventud del PTS de “Presentar en el Consejo Superior la solicitud de inmediata y completa remoción del cargo para el Vicerrector con licencia Darío Richarte.” Al parecer se empezó a abrir una ‘grieta’ entre las gestiones de las facultades; mientras se manteníann en silencio con la designación del vicerrector, ahora frente al escándalo que atraviesa a los servicios de inteligencia a partir de la muerte del fiscal federal Nisman, empiezan a dejarlo en soledad.
Con el retroceso de Richarte en la UBA las organizaciones estudiantiles salieron a buscar más respaldos a su campaña con el objetivo de que la licencia no le implique al vicerrector poder regresar a su puesto cuando aclare la tormenta. La denuncia por parte de los Presidentes de los Centros de Estudiantes Nicolás Vigarelli de Sociales y Jennifer Wainberg de Filosofía y Letras, sobre las implicancias de que un ex jefe de la SIDE forme parte del gobierno universitario obtuvo el apoyo de personalidades y organismos de reconocida trayectoria en la lucha por defender de los derechos humanos, empezando por Elia Espen de Madres de Plaza de Mayo (Línea Fundadora) y Osvaldo Bayer.
La sesión del Consejo Superior en el día de hoy será significativa para comprobar hasta dónde puede abrirse una crisis en el cogobierno de la UBA si los aliados de Richarte (Franja Morada, PRO, peronistas) deciden dar lugar al reclamo que viene en ascenso desde organizaciones estudiantiles, docentes, y Decanos de las facultades de Sociales y Filosofía y Letras que aseguraron tener la intención presentar el pedido de remoción para el Vicerrector. Así es como las disputas de poder abiertas por la muerte de Nisman y la “guerra de servicios” extiende sus garras también en la UBA, e inauguran un año lectivo donde a diferencia de los anteriores, las autoridades jerárquicas deberán enfrentarse al cuestionamiento de la opinión pública.
Reproducimos la declaración y las adhesiones hasta el momento:
En nuestro compromiso con los DDHH y contra la impunidad de ayer y de hoy, acompañamos la denuncia de los Centros de Estudiantes a Darío Richarte, actual vicerrector de la UBA, ex subjefe de la SIDE durante el gobierno de la Alianza 1999-2001, organismo además cumplió un rol clave durante la dictadura militar en la detención y desaparición de más de 30.000 compañeros/as Los abajo firmantes acompañamos la exigencia de que sea apartado de su actual cargo en la UBA.
No podemos permitir que la UBA esté gobernada por los servicios de inteligencia, quienes fueron pilar central en la actuación de los genocidas en el pasado y son los responsables de llevar adelante el espionaje y las infiltraciones a las organizaciones sociales y políticas en el presente.
Reclamamos la apertura de los archivos de inteligencia de la SIDE.
¡Fuera los servicios de inteligencia de la universidad! ¡Fuera Richarte de la UBA!
