El el marco de su campaña y luego de recibir el apoyo de Ossandón, el candidato de la derecha dijo estar por la gratuidad en la educación, medida que dependerá de un mayor crecimiento económico.
Sábado 25 de noviembre de 2017
En pleno proceso de campaña Piñera asume una de las tantas luchas del pueblo chileno, la gratuidad. Cuando ya había dejado claro en todos lados que está en contra de la gratuidad, justificándose en que los padres que pagan la educación sienten un mayor compromiso. Ahora el candidato de la derecha y los empresarios anuncia la gratuidad como medida para acaparar más votos.
¿De qué gratuidad se trata? Según lo consignó a radio Bío Bío, “Vamos a avanzar en gratuidad” sin especificar monto, pero sí afirmando que dependerá del crecimiento de la economía. Es decir, en ningún caso es una gratuidad garantizada, sino que deja al arbitrio de la economía y de las decisiones políticas de su bancada, la posibilidad en avanzar en gratuidad; tal como aprendimos de su anterior gobierno, donde los derechos sociales no son una prioridad, sino las ganancias empresariales y privadas.
Consignó, además, querer avanzar con los sectores más vulnerables y de la clase media y privilegiar la educación técnico profesional, en donde están más de la mitad de los estudiantes de la educación profesional. En un contexto en donde la mayor parte de la educación técnica está en manos de empresas educativas o comerciales privadas, los recursos invertidos del Estado irán a parar a manos privadas, con lo cual se aumentará el desvío de fondos públicos a empresarios de la educación, precarizando y desfinanciando aún más a la educación pública.
A todas luces el candidato de la derecha quiere ganar terreno tomando las demandas más sentidas de los movimientos sociales, para adecuarlas dentro de un modelo capitalista y empresarial.
