Al término del concejo de gabinete, Piñera anunció que retirará al Comando Jungla, pero a cambio aumentará la presencia de Fuerzas Especiales. Un nuevo intento de reubicar al Gobierno frente a los cuestionamientos públicos.
Lunes 10 de diciembre de 2018
Un mes ha pasado desde el asesinato del comunero mapuche Camilo Catrillanca, los cuestionamientos al gobierno y las instituciones del Estado como Carabineros siguen abiertas, a pesar que el proceso de movilizaciones se ha debilitado.
Hoy, luego de 3 días en los que se desarrolló el consejo de gabinete, el gobierno anuncio el retiro del cuestionado Comando Jungla, responsables directos del asesinato a Catrillanca. En medio de una semana de duros cuestionamientos a la institución, con renuncia de altos mandos y la limitación los aportes reservados.
El retiro del Comando Jungla fue una demanda de sectores de las comunidades mapuches, junto con el fin de la militarización del Wallmapu. Y que el mismo gobierno que hoy anuncia su retiro, hace solo unas semanas negaba hipócritamente su existencia.
Pero junto a este anuncio, que en primera instancia muestra la debilidad del gobierno, también plantearon que reforzarían la presencia de Fuerzas Especiales. Mantienen de todas formas la militarización y represión al pueblo mapuche, en función de la defensa de la propiedad privada de las grandes forestales.
La derecha busca de esta forma, cerrar por arriba nuevos cuestiones y reubicarse frente a la situación abierta y a su debilidad, pero manteniendo la represión en la región en favor de los intereses empresariales.