Esta semana la oposición abrió una línea contra el gobierno cuestionando la falta de iniciativas legislativas. En respuesta Piñera se obliga a dialogar con el sector.
Domingo 1ro de julio de 2018
La llamada "sequía legislativa" que acusa la oposición fue respondida por el gobierno con el acercamiento a los partidos de Chile Vamos, quienes también han criticado una debilidad el gobierno para asentarse. Pero además tuvo una línea hacia la Democracia Cristiana.
Por ejemplo, en su paso por el sur, Piñera emplazó a los parlamentarios, especialmente de la oposición, a "ponerse a trabajar" y dejar de "obstruir" la agenda del gobierno. Sin embargo, debió aliviar el tono del debate para poder dialogar con sectores, haciendo eco de las declaraciones del senador RN Andrés Allamand de que "si no hay mayoría, más necesidad tenemos de dialogar".
En este aspecto Piñera sopesó sus dichos, "me gustaría hacer una distinción. Hay sectores de la oposición que están con un ánimo colaborador con Chile, y yo agradezco esa actitud". Sin embargo indicó que "hay otros sectores que se han dedicado a obstruir todo lo que hace nuestro Gobierno, a frenar los proyectos de ley en el Congreso, a presentar todo tipo de requerimientos sin fundamentos ante la Contraloría, a interpelar y acusar constitucionalmente a los ministros. Ese camino está equivocado." cerró el mandatario.
Consecuente con esta línea viene proponiendo reinstalar las urgencias legislativas e iniciar una ofensiva con la Comisión de Ética del parlamento para desbloquear esta obstrucción. "Son 45 urgencias y de esas muy pocas están siendo respetadas; evaluaremos, ante este incumplimiento mayoritario, pedirle a la Comisión de Ética que resuelva según corresponda si debiese existir sanción" según declaró la diputada RN Marcela Sabat.