Además de informar de los números terribles de la pandemia que se reportan día a día camuflados por la abundancia de camas hospitalarias, la conferencia de la secretaría de Salud tuvo que lidiar con el tema de las "vacunas echadas a perder".
Raúl Dosta @raul_dosta
Miércoles 10 de marzo de 2021
El día de hoy fallecieron 866 por la Covid-19, de acuerdo con la información proporcionada por la secretaría de Salud en su conferencia diaria. Esto arroja un acumulado de 191 mil 789 víctimas mortales de la pandemia. El total de contagios estimados asciende a 2 millones 332 mil 909.
Estos son los datos negros de la enfermedad, de los que pretenden que desviemos la atención, hablándonos de una capacidad hospitalaria cada vez mayor y millones y millones de vacunas por llegar. Aunque, a decir verdad, la atención estaba puesta el día de hoy en el truculento caso de las "vacunas echadas a perder".
La guerra de las vacunas, a la mexicana
En el marco de la campaña política lanzada por los gobiernos estatales "opositores", ya encarrerados en la coyuntura electoral, el titular de Salud de Nuevo León, Manuel de la O Cavazos, comentó que las vacunas “no son enchiladas, papitas o Sabritas, ni refrescos” y en caso de aplicarlas así “echadas a perder”, las personas a las que se les apliquen, podrían contagiarse y morir.
También aseguró haber detectado “vacunas echadas a perder” en los estados de Tamaulipas, Coahuila, Jalisco, Michoacán, Guanajuato, (todos estos estados caracterizados por "llevar la contra" mediáticamente a la irregular campaña de vacunación del gobierno de la 4T), además de Campeche y Oaxaca. De igual manera anunció que devolvería 4,680 dosis de la vacuna de Sinovac, de origen chino, que llegaron en condiciones inadecuadas de conservación.
En respuesta el ponente de la conferencia de hoy, el dr. Ruy López Ridaura, explicó el mecanismo de control de temperaturas durante los traslados, a base de termómetros que monitorean y registran los datos durante el trayecto. Partiendo de los mismos registros del beligerante del dr. Cavazos explicó los datos más altos obtenidos por espacios menores a dos horas, fueron de doce grados Celsius, cuando el rango recomendado es de 2 a 8 grados.
Considerando las especificaciones de Sinovac, el riesgo de descomposicón es prácticamente nulo, es decir está dentro del margen de seguridad del manejo del producto, el cual se determinó en base a estudios en los que el producto se llega a exponer a 25 grados Celsius, sin mostrar deterioro por lo menos en 14 días.
Tal vez el "dr. Bronco" tiene el conocimiento de estas especificaciones técnicas, pero la política es así de confundidora; quizás el golpeteo pare ahí y acepte la propuesta del dr. López Ridaura: "se pueden usar sin ningún riesgo". Pero la gente de a pie qué culpa tiene de la politización de la "lucha" contra la Covid-19 y que, con la colaboración de algunos medios, se vea confundido ante un tema tan delicado como es salvar la vida ante la pandemia.