Publicamos en nuestra sección de Tribuna Abierta la carta escrita por la médica Gloria Gabriela Cárdenas Alarcón del Hospital de Espinar (Cuzco), la cual llego a nuestra redacción. La médica, quien tras confirmar que los heridos en las manifestaciones de Espinar han sido producto de armas de fuego, ha empezado a ser víctima de hostigamiento por parte de la Policía Nacional. Las declaraciones de la médica muestran la violencia policial con la que se viene reprimiendo a los campesinos que vienen luchando en esta zona desde el 15 de julio y que desde el gobierno central se pretenden ocultar.
Lunes 3 de agosto de 2020
Fotos: Álvaro Franco
Espinar, 27 de Julio de 2020
CARTA ABIERTA PARA SALVAGUARDAR MI INTEGRIDAD FISICA Y EN DEFENSA DE MI VIDA
Dirigida a:
Presidente de la Republica del Perú: Ing. Martin Vizcarra Cornejo.
Defensoría del Pueblo: Rosa Emperatriz Santa Cruz Córdova.
Jefa de la Oficina Defensorial del Cusco
Federación Médica del Perú.
Colegio Médico del Perú.
Yo, Gloria Gabriela Cárdenas Alarcón, identificada con el DNI Nº 05360607, médico cirujano del Hospital Espinar, declaro en pleno uso de mis facultades la siguiente información de suma importancia y en carácter de urgencia:
1. El día 22 de Julio del presente año atendí a 03 pacientes por heridas por arma de fuego producidas en el enfrentamiento entre manifestantes y agentes del orden, tal y como costa en el informe medico detallado y remitido al Director del Hospital de Espinar, Dr. José Luis Gómez Quispe.
2. Sin ninguna otra intención que la de esclarecer el contenido objetivo de los hechos declare a los medios de prensa y comunicación que efectivamente se trataban de manifestantes heridos por arma de fuego.
3. El día 26 de Julio del presente, los sub-oficiales Marín Acosta, Gallardo Reyes y Urbina Castañeda se apersonaron al Hospital del Espinar, identificándose como agentes especiales de la DIROES y en términos despectivos hacia mi persona solicitaron esclarecimientos de los hechos sucedidos, centrados en mis declaraciones a la prensa.
4. El día de hoy, 27 de Julio, recibí una citación policial firmada por el SOB-PNP Leocadio Cusiyunca Callañaupa con el fin de que me dirija a la Comisaria de Espinar. La misma fue entregada bajo amenazas de que dado un posible incumplimiento se procedería con el uso de la fuerza.
Por otro lado, y considerando lo anteriormente señalado, puedo concluir que hay hacia mi persona un claro hostigamiento de parte de la Policía Nacional del Perú. Vengo laborando en la localidad de Espinar por más de 12 años consecutivos y soy consciente de los abusos que se cometen en nombre de ley, por lo cual pongo bajo vuestro conocimiento que si algo llegara a sucederme no sería producto del azar o mala suerte y tajantemente responsabilizo la integridad de mi vida a la propia Policía Nacional del Perú, pues estoy segura que así como hay malos elementos, también hay efectivos que trabajan día a día enaltecer sus funciones y dejar en alto en nombre de su propia institución.
No me cabe a mi juzgar los hechos suscitados en los enfrentamientos antes referidos, tan solo como profesional de salud constaté las lesiones únicas, con orificios de entrada y salida y escara características de heridas de bala en tres de los cinco pacientes que atendí ese día.
Me despido, sin otro particular que el agradecimiento por su atención.