El gobierno mexicano ha empezado a prepararse ante las “contingencias económicas” que podrían presentarse de ganar Trump las próximas elecciones en Estados Unidos, ¿qué harán?
Sábado 5 de noviembre de 2016
Las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos se han convertido en el indicador que determina el futuro económico de nuestro país, siendo una economía dependiente del rumbo que tome el vecino del norte; el gobierno federal y las instituciones financieras nacionales mexicanas pretenden estar preparados ante la posible llegada de Donald Trump a la presidencia.
Este jueves, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, anunció que: “Si el escenario adverso se manifiesta, las autoridades mexicanas responderemos. Es un plan de contingencia que estamos platicando con el secretario de Hacienda. Esperemos que no lo tengamos que utilizar”.
El empresario Trump ha afirmado en múltiples ocasiones que de llegar a la Casa Blanca revisará los tratados de libre comercio que mantiene el país con México, su plan proteccionista para la economía estadunidense podría cambiar el panorama económico drásticamente para México, que mantiene el 75% de sus negocios con Estados Unidos.
El remedio
La alta volatilidad de la moneda y la caída las exportaciones son parte de las consecuencias del juego especulativo que el magnate yanqui ha generado durante el último periodo. El gobierno mexicano ha reaccionado, normalmente subiendo las tasas de interés, hasta ahora hemos visto cuatro subidas en lo que va del año, llegando ya a 4.75%.
Pero de llegar a la presidencia Donald Trump, la subida de las tasas de interés podría no alcanzar para una economía tan dependiente del comercio con el vecino del norte. Las presiones inflacionarias derivadas de la devaluación probable de la moneda mexicana, vendrían a conjugarse con los incentivos para la salida de capitales, la deuda externa se iría a las nubes y ante la dificultad del gobierno mexicano para conseguir ingresos por la baja en los precios del petróleo y la caída de las exportaciones, seguramente se vendría una reforma fiscal que aumentará la carga impositiva.
Un gran bache para la economía podría estar a la vuelta de la esquina, incluso podríamos ver una tasa cero o negativa para el crecimiento del Producto Interno Bruto del próximo año, la dependencia que nuestro país mantiene respecto de la Inversión Extranjera Directa jugará en contra.
El plan oficial del gobierno federal ante la posible “contingencia” no se ha dado a conocer, sin embargo, las medidas para equilibrar la macroeconomía del país tienen siempre un final que se descarga sobre la clase trabajadora. Habrá que estar atentos pues podrían venir decisiones en contra de los intereses de las mayorías para salvar las ganancias de unos cuantos.