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Red Internacional
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CINE MÉXICO. Premios Ariel: Recuerdan a los estudiantes de cine desaparecidos en Jalisco

En la premiación a lo mejor del cine mexicano se recordó la violencia que existe en el país y que ha golpeado nuevamente a la comunidad cinematográfica con la desaparición de tres promesas del séptimo arte.

Jueves 7 de junio de 2018

Durante la entrega de los 60 premios Ariel, en el Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México, se recordó a los tres estudiantes de cine desaparecidos en el estado de Jalisco lo que conmovió a los asistentes, ya que la violencia en el país ha tocado nuevamente al medio cinematográfico.

En el evento destacaron los filmes Sueño en otro idioma y La región salvaje obteniendo seis y cinco premios en distintas categorías.

El Ariel es el reconocimiento que otorga la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) a lo mejor del cine nacional, en esta edición en total se entregaron 27 Arieles en 29 categorías, 31 de plata y 3 de oro.

Como mejor película fue galardonada la cinta Sueño en otro idioma. También obtuvo el Ariel a mejor actor por la interpretación de Eligio Meléndez, el premio por mejor fotografía de Tonatiuh Martínez, lo mismo para mejor guión original de Carlos Contreras, además de los reconocimientos por mejor música original y mejor sonido.

El Ariel para mejor dirección fue para Amat Escalante por La región salvaje, también obtuvo el premio como mejor actriz de cuadro por la actuación de Bernarda Trueba. Igual fue galardonado por mejor edición, efectos especiales y efectos visuales.

El Ariel de Oro fue para la actriz Queta Lavat por su trayectoria con más de 100 películas. Otra presea dorada fue para el fotógrafo de origen suizo Toni Kuhn por su trabajo en el cine mexicano.

Karina Gidi obtivo el Ariel por mejor actriz por Los adioses, Andrés Almeida fue galardonado como mejor actor de cuadro por Tiempo compartido. Por esta misma cinta Miguel Rodarte obtuvo el premio por mejor actuación masculina y Verónica Toussaint fue reconocida como por mejor coactuación femenina por su participación en Oso polar.

Juan Ramón López obtuvo el Ariel a relevación masculina por su participación en Vuelven, en tanto Ana Valeria Becerril fue galardonada como mejor revelación femenina por Las hijas de Abril .

El mejor cortometraje animado fue Cerulia de Sofía Carrillo. El mejor cortometraje documental fue para la producción La muñeca tetona de los directores Diego Enrique Osorno y Alexandro Aldrete; y el mejor cortometraje de ficción fue para Oasis de Alejandro Zuno.

La libertad del diablo de Everardo González obtuvo el premio por mejor largometraje documental. El Ariel para la mejor opera prima fue para El vigilante de Diego Ros, mientras que la mejor película iberoamericana fue para el filme chileno Una mujer fantástica de Sebastián Lelio.

El Ariel por mejor diseño de arte fue para dos cintas El elegido y La habitación, el mejor maquillaje fue para la cinta Vuelven. El Ariel para mejor vestuario fue para La habitación.

Para el Ariel se inscribieron 144 películas que fueron exhibidas durante 2017. Se reunieron a 120 personas en la primera etapa de selección de nominados y a 288 personas en el Comité de Elección de Ganadores.

En la alfombra roja del evento se pudo ver que muchos llevaban una cinta con el lema “No somos tres, somos todos” donde se pedía justicia por los estudiantes de cine desaparecidos y asesinados en el municipio de Tonalá, Jalisco, el pasado mes de marzo.

Durante los discursos se destacó la exigencia a las autoridades de detener la violencia en México, se recordó los miles de desaparecidos y asesinados en el país, además se recordó otro del aniversario de la tragedia de la guardería ABC que sigue impune.

Fue una joven alumna de cine quien, en representación de la comunidad cinematográfica, leyó un texto en homenaje a los estudiantes desaparecidos en Jalisco. No sólo pidió justicia para Salomón, Daniel y Marco, también para los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en 2014.

El discurso cerró:

Paremos esta guerra. Que la rabia nos dé fuerza y la imaginación nos guíe”.

El Palacio de Bellas Artes retumbo cuando los asistentes corearon “no somos tres, ”somos todos.