El Partido Revolucionario Institucional detectó la presencia de Ricardo Monreal en Ecatepec y trata de evitar que el jefe de la Delegación Cuauhtémoc y dirigente de Morena apoye a su partido en esta zona.

Raúl Dosta @raul_dosta
Domingo 4 de junio de 2017
El Partido Revolucionario Institucional emitió un comunicado para justificar el acoso realizado por sus militantes al dirigente de Morena, Ricardo Monreal. En el mismo asegura que sus militantes detectaron que “desde el día de ayer, militantes de este instituto recibieron reportes de la llegada del jefe delegacional de Cuauhtémoc, en Ciudad de México, junto con un grupo de personas y maletas, al hotel Fiesta Inn de Plaza de las Américas, ubicada este Ecatepec”.
Ante esta “detección” la diputada priista Cynthia López Castro organizó a un grupo de militantes para mantener cercado a Monreal y sus ayudantes a las puertas del hotel, lo cual generó un altercado con éstos, resultando herido en una mano el Farud Miguel Take Roaro pues en el medio de los empujones rompieron la puerta del hotel.
Así, en su comunicado el PRI del Estado de México, hace un llamado para que la FEPADE dé seguimiento a la presencia de Monreal "quien lejos de encargarse de la responsabilidad para la que fue electo, participa de manera ilegal en el proceso electoral del Estado de México".
Militantes agresivos
Ricardo Monreal anunció que dará una conferencia posteriormente sobre este hecho y la detención previa y “entrega” a la policía realizada por el grupo de choque priista, de uno de sus asesores, Alejandro Bernal, a quien supuestamente le encontraron una pistola 9 mm y dinero que, según el comunicado priista, sería utilizado para comprar votos. A lo que Monreal respondió vía Twitter que se trata de “un vil montaje que evidencia la enorme desesperación priista”.
Posteriormente Alejandro Rojas apareció en el lugar de los hechos para ratificar la versión de montaje y que los priistas le sembraron la pistola a Alejandro Bernal. Mientras que una reportera de Milenio TV reportó que los militantes priistas no sólo impidieron que los periodistas realizaran su labor, sino que además los agredieron resultando con algunas lesiones reporteros de El Grafico, de Univisión y de Televisa.