El Poder Judicial de la Federación ratificó el amparo interpuesto por el exlíder del PRI en la Ciudad de México, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, acusado entre otras cosas, de desvío de fondos para financiar una red de prostitución al interior del partido.
Viernes 27 de febrero de 2015
La Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) será la instancia encarga de resolver si procede o no la acción penal en contra del exlíder priísta Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, acusado en 2014 de operar una red de prostitución al interior del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Ciudad de México y también de trata de personas, desvío de recursos públicos, abuso sexual, hostigamiento sexual y violación.
En septiembre del año pasado, el Consejo General del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) aprobó la exoneración del PRI-DF y de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, alegando falta de elementos e inconsistencias en la investigación.
A pesar de las denuncias de las víctimas que aseguran haber recibido amenazas de muerte por parte de Gutiérrez de la Torre, la Unidad Técnica Especializada de Fiscalización del IEDF manifestó que no cuentan con elementos suficientes para “afirmar o negar si existió un posible desvío de recursos, y si éste se empleó en las actividades objeto del presente procedimiento”.
La posible sentencia positiva para Gutiérrez de la Torre, es una muestra cínica de cómo esta democracia para ricos está al servicio de la élite económica y política del país, y no de las víctimas y familiares en busca de justicia. Son estos políticos corruptos y misóginos, los que están a cargo de las decisiones políticas y económicas del país, y que mediante el uso de la fuerza física e institucional, las imponen al conjunto de la población.
Red de prostitución al servicio del PRI
En abril del año pasado se dio a conocer la investigación realizada por el equipo de Carmen Aristegui, sobre una red de prostitución al interior y servicio del PRI, operada por el entonces dirigente del mismo en la Cuidad de México, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre.
Mediante esta red contactaba a jovencitas presas del desempleo y precariedad y les ofrecía empleos como edecanes, así como la prestación de servicios sexuales para con el dirigente priista. Estas jóvenes eran registradas como secretarias en el padrón del PRI, con un salario de 11 mil pesos mensuales pagados con dinero público.
La noticia causó indignación en las redes sociales y mostró el repudio al partido más viejo del país y que hoy está en el poder. Cinco horas después de conocida la noticia, se apartó del cargo al dirigente priista y al día siguiente se realizó una manifestación frente a las oficinas del PRI-DF.
La familia basura
Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre es hijo y heredero del conocido priista Rafael Gutiérrez Moreno, “Rey de la Basura”, quien fuera el líder de la unión de pepenadores y pieza clave del PRI en la ciudad al aportar grandes cantidades de dinero a sus campañas electorales. Rafael Gutiérrez -acusado de haber violado a más de 100 mujeres- reinaba en la mafia alrededor de la basura, y bajo amenazas de muerte exigía a los pepenadores que le regalaran a sus hijas.
En 1987 fue asesinado en su mansión por la orden de una de sus esposas, Martha García de 29 años, a quien prácticamente mantenía secuestrada en su casa. Ante las autoridades, ella no mostró ningún arrepentimiento y describió los once años de infierno que vivió junto a él: “abusó de mi madre, de mi sobrina, de las mujeres de mi familia y, siempre cínico, contaba los hijos que tenía y ya iba en 56. Con él tuve cinco y quería llegar a 180”.
Rafael Gutiérrez fue alcanzando poder con dinero y violencia, al mismo tiempo que penetraba en el PRI nacional. La madre de Cuauhtémoc Gutiérrez, Guillermina de la Torre, la “Zarina de la Basura”, es conocida por sus redes de explotación y uso de violencia, así como por haber sido diputada por el PRI.
Políticos, prostitución y redes de trata
Las relaciones de prostitución y redes de trata con los políticos no son una novedad. Todos los niveles de gobierno se han caracterizado por su complicidad con los asesinos de mujeres, así como por su participación en redes de trata para explotación sexual o laboral.
En octubre de 2013 se dio a conocer el caso de una joven búlgara que se suicidó en uno de los departamentos del Niño Verde, Jorge Emilio González, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Cancún, quién pidió ayuda al gobernador para que no se hiciera público. Una de las hipótesis, es que la joven fallecida formaba parte de un grupo de jóvenes extranjeras que trajeron para turismo sexual.
También, en distintas ocasiones se hicieron denuncias en contra del ex dirigente nacional del PRD Jesús Ortega, y sus favoritismos con centros de prostitución. Mientras que su esposa Angélica de la Peña -senadora del PRD- fue una de las impulsoras de la Ley de Trata, que mediante la derogación de sus artículos 19, 20 y 21 dejaba sin responsabilidad penal a quienes cometan este crimen.
En el Estado de México, en múltiples ocasiones se ha alertado sobre la desaparición de cientos de jóvenes de entre 13 y 19 años con un perfil y modo similar. Según David Mancera Figueroa, presidente de Solidaridad con las Familias de Ecatepec: “estamos hablando de una red de trata de personas y trata de personas en todas las modalidades”.
Mientras los políticos y empresarios se benefician con la explotación de cientos de miles en todo el país, en los últimos años la violencia contra las mujeres en México ha aumentado inauditamente: cada tres horas con 20 minutos se asesina a una mujer; a la par las redes de trata y prostitución se han fortalecido enormemente, bajo el amparo de la militarización del país y la impunidad.