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Red Internacional
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PRECARIZACION LABORAL. Primer Empleo: pura felicidad para los empresarios

Más precarización laboral y beneficios a las patronales que contrataron en negro. ¿De qué se trata el plan presentado por Mauricio Macri para “facilitar” la contratación de jóvenes?

Victoria Sánchez

Victoria Sánchez @VickytaTw

Lunes 23 de mayo de 2016 09:59

Casi un mes atrás, Mauricio Macri presentó en el Congreso el proyecto de ley “Primer Empleo”. Bajo la excusa de “Remover todas las barreras posibles y facilitar desde el Estado la creación de puestos de trabajo” así como generar “estímulos que apalanquen la decisión empresarial” el proyecto es un nuevo mecanismo para favorecer las ganancias capitalistas.

¿En qué consiste?

Los “beneficiarios” serian los y las jóvenes de entre 18 y 24 años de todo el país, extensible hasta los 16 años en los casos aprobados por la ley de contrato de trabajo, que accedan a su primer empleo o que registren menos de 36 meses de aportes a la seguridad social. A su vez, no se consideraran los aportes realizados por el monotributo social, para que pueda acceder al plan. Para el caso de las provincias que forman parte del Plan Belgrano no se considera ningún límite de edad.

El proyecto de ley exime a las empresas del pago de los aportes patronales y jubilatorios progresivamente hasta un 100 %, por el período máximo de tres años. Para esto considera solamente a aquellos trabajadores que tengan como máximo un sueldo bruto equivalente a 1,5 del salario mínimo vital y móvil. Actualmente el mismo es de $6060 y a partir de Junio será de $6810. El afortunado o afortunada contaría en el mejor de los casos con $8478, 45 en mano a fin de mes a partir de junio. El “trabajo de calidad” que propone Cambiemos incluye salarios que no llegan ni a la mitad de la canasta básica de alimentos, estipulada en marzo por los trabajadores del INDEC en $17.492.

Como señalamos en otra nota, la norma prevé que para poder acceder al beneficio los empresarios deben mantener la plantilla laboral estable. El proyecto de ley define que se debe efectuar un “incremento respecto de la nómina del plantel promedio determinado sobre la dotación del último trimestre del año 2015”.

Este es tal vez uno de los puntos más “tramposos” del proyecto, ya que el único requisito es mantener estable la plantilla de personal. Es decir que se podría echar a 5 trabajadores y contratar a 5 nuevos, y seguir obteniendo el beneficio. Dando lugar a la renovación de personal, en detrimento de aquellos trabajadores con mayor experiencia y salarios. Esta trampa fue habilitada la semana pasada con el veto de Mauricio Macri a la Ley Antidespidos.

La vista gorda

Como si no alcanzara con tamaño favor, el proyecto incluye un apartado de blanqueo para los trabajadores que no se encuentran registrados, o para su rectificación (quienes están subdeclarados).

El empresario podrá blanquear hasta diez trabajadores con sesenta meses (es decir 5 años) de trabajo en negro, y no pagar un solo peso por los aportes adeudados. Esta estafa se completa con que no solo le condonan todas las deudas, sino que estos mismos trabajadores en el caso de cumplir los requisitos pueden ser incluidos en el Plan Primer Empleo. Es decir que los capitalistas podrían beneficiarse durante ocho años, al no pagarles un peso en concepto de jubilación a los trabajadores con el aval total del Estado. Un verdadero saqueo.

Para consumar el escándalo, los empresarios recibirán un “incentivo económico” de hasta el 8 % por trabajador. Para esto considerará la remuneración bruta sin superar el proporcional al 1,5 del salario mínimo vital y móvil, aproximadamente $818. Para las provincias incluidas en el plan Belgrano el incentivo es de hasta el 17 %, casi $1737, considerando en ambos casos el salario mínimo vital y móvil vigente a partir de junio del corriente año, ya que el tercer aumento se dará en enero del 2017.

En sus discursos, Macri se refiere a la “pesada herencia” recibida del kirchnerismo para justificar los brutales tarifazos y ajuste desarrollado. Sin embargo, la herencia recibida en torno a las condiciones laborales parece no molestarle.

Como señalan Agustín Salvia y Javier Lindenboim en el libro Hora de Balance: Proceso de acumulación, mercado de trabajo y bienestar, los niveles de precarización registrados en el grupo etáreo de 18 a 24 años durante el gobierno kirchnerista se mantuvieron en niveles similares a los registrados durante la convertibilidad. Según su estudio, considerando datos de la EPH, en octubre de 1995 el 35,3 % de los jóvenes tenía trabajo precario, mientras que en el cuarto trimestre del 2012 la misma variable llegaba al 29,4 %. Es decir que luego de años de crecimiento a tasas chinas, con el precio de las commodities a niveles records, el kirchnerismo bajó ese indicador menos del 6 %.

El proyecto Primer Empleo, así como el veto a la Ley Antidespidos son una muestra de cual es el plan de Cambiemos para el trabajo, y más específicamente para la juventud trabajadora. Los ataques recibidos cuentan con el silencio cómplice de la burocracia sindical, que garantiza la paz social y se niega a pelear por las demandas de los trabajadores. El paro del 29 de abril mostró de forma distorsionada el malestar que recorre a miles de trabajadores. La demora en responder al veto de Macri a la ley antidespidos confirma el factor conservador que juegan las cúpulas sindicales. Es necesario enfrentar el plan de Cambiemos en las calles y que las centrales convoquen a un paro nacional para enfrentar el ajuste en curso.


Victoria Sánchez

Nacida en Bs. As. en 1986. Es economista y docente. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2010. Coedita la sección de Economía de La Izquierda Diario.

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