"El 80" forma parte del brazo armado del cártel de Juárez y según testigos se presenta libremente a las reuniones de las alcaldías que su grupo controla, no hay denuncia alguna en su contra por este u otro delito.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Domingo 26 de marzo de 2017
En la escena del crimen de la periodista Miroslava Breach se colocó una cartulina que atribuía el asesinato a uno de los líderes del cártel La Línea, Carlos Arturo Quintana, alias "El 80", esto abre una línea de investigación obligada en su contra, pero las autoridades no han emitido orden de presentación o captura.
La participación de "El 80" en la política del Estado ligada al PRI fue denunciada las pasadas elecciones por el diario La Jornada y otros medios, cuando la suegra de Quintana, Silvia Mariscal Estrada entonces secretaria del Ayuntamiento de Bachíniva, fue postulada a esta misma alcaldía por el partido tricolor. Esto obligó al gobernador de Chihuahua, Javier Corral, a desmarcarse del tema, pidiendo a la Secretaría de Gobernación investigar el vínculo de priistas con el narco en la entidad.
La mayoría de los candidatos participantes en el proceso electoral respondieron con un llamado a la investigación de cada postulado a un puesto de representación popular. Una respuesta formal viniendo de los partidos patronales que prácticamente en todas las entidades que gobiernan toleran el accionar cotidiano del narcotráfico a nivel nacional y como muestra el tema de Ayotzinapa, en otros casos cogobiernan con el narco.
En este mismo proceso la prensa denunció el registro de dos precandidatos relacionados a los grupos del cártel de Sinaloa y La Línea para la elección en dos municipios de Chihuahua, ambos ligados al PRI, mientras la candidatura de Silvia Mariscal se frustró por las denuncias de la prensa.
Asimismo, hay declaraciones de autoridades de Chihuahua que plantean que la colocación de una cartulina que implique al cártel de La Línea. También podría ser un distractor que busque encubrir a los culpables, que a su vez podrían estar relacionados con el poder político estatal a causa de los temas que abordaba la periodista Miroslava Breach.
Así inician mal las investigaciones para este aberrante crimen, con un gobierno estatal que busca deslindar responsabilidades, un primer posible implicado sin ser llamado a declarar, el nombre del PRI ligado al entramado cotidiano del narco en Chihuahua y una compañera periodista cuya vida fue detenida a ocho disparos.
Demasiados tiros para callar la pluma de una mujer frente a su hijo, de una gran trayectoria profesional y valiente.
Esta justicia no está al servicio de la prensa comprometida con la verdad, ni de las mujeres muertas por feminicidio, ni de las desaparecidas o las víctimas de trata, ni de los migrantes o los miles de trabajadores y jóvenes que sufren la violencia a diario, es una justicia expedita para ricos y partidos patronales.
Desde la "guerra contra el narco" los muertos los pone el pueblo y mientras el gobierno los oculta y difama, entre ellos, al menos 200 mil personas y un centenar de periodistas. Por eso junto a los periodistas que hoy protestan en varios estados del país por justicia para Miroslava, es necesario que salgan todas las organizaciones sociales, políticas y de trabajadores, mujeres, de derechos humanos para impedir que quede en la impunidad su muerte.
Con información de La Jornada.