Los sostuvo la madre de una de las víctimas de los curas pedófilos del Instituto Próvolo durante la marcha que los 19 de cada mes realizan en el KM0 de la ciudad de Mendoza
Sábado 20 de mayo de 2017 21:36
Próvolo: "Vinieron a investigar a las víctimas" - YouTube
En una entrevista a medios locales y nacionales, Paola Gonzalez, madre de una de las víctimas de los curas pedófilos del Instituto Próvolo, se refirió a los enviados del Vaticano que se encuentran en Mendoza. "Vinieron a investigar a las víctimas" sostuvo y afirmó que los familiares no quieren que los curas enviados por el Vaticano tenga información de sus hijos. También reclamó que los curas devuelvan la foja del expediente que tienen en su poder.
Desde hace unas semanas, dos enviados del Vaticano llegaron a Mendoza para inmiscuirse en la causa que investiga lo ocurrido en el Instituto Próvolo. La comisión investigadora, integrada por los curas Dante Simón y Juan Martínez, será la encargada de llevar adelante la causa canónica que impulsan desde el Vaticano. Sin embargo los curas, amparándose en el Concordato de 1966 firmado con el Estado argentino, durante la presidencia de facto de Juan Carlos Onganía, señalaron que no brindarán información a la Justicia de nuestro país.
El pasado viernes el vicario judicial enviado por el Vaticano, citó a la prensa a un hotel céntrico para hablar de su trabajo. Allí insistió en la independencia de la Iglesia, no sólo para realizar la investigación interna, sino también para no revelar los detalles que pudieran surgir de allí, algo que está previsto en el Concordato citado. "Hay que recordar que está vigente el concordato entre la Santa Sede y el Estado argentino, que le reconoce a la Iglesia la independencia para llevar adelante todo aquello que haga a su propio funcionamiento. Eso supone que tiene facultad, como tiene el Estado, de investigar para su propio fin" dijo con completa impunidad Dante Simón, en respuesta al pedido de "colaboración" que le había enviado la Fiscalía de Luján-Maipú para que aportaran la información que pudiera resultar de su investigación interna.
Además, Dante Simón resaltó que la Iglesia no tiene la estructura del Estado para investigar e insistió también en su primera intención de tener acceso a la causa penal, algo que los abogados de las víctimas se niegan a que suceda, para evitar la injerencia pontificia en la investigación.
Al cura se lo consultó sobre su conocimiento de las acusaciones a Nicola Corradi como autor de abusos en Verona y en La Plata, a lo que Simón respondió que él y el notario Juan Martínez tienen "el mandato" de investigar lo que pudo haber ocurrido en el Próvolo de Luján. "Si hay situaciones en La Plata o Verona le corresponderá a la Iglesia determinar quién lo haga", afirmó.
A diferencia de lo que sucedió en su primera vez en Mendoza, cuando sólo se entrevistaron con Corradi y Corbacho, esta vez la dupla enviada por el Papa Francisco, reconoció que habló con un allegado a una de las víctimas. "Hemos tenido contacto con una presunta víctima. No queremos dar mayores detalles por prudencia", dijo Simón.
"Vamos a venir a Mendoza la cantidad de veces que sea necesario. Somos una suerte de fiscal y tenemos que recoger la información y trasladarla a la Santa Sede que es el órgano competente y va a decidir qué pasos dar. Y si se determina que haya juicio canónico nosotros no podemos intervenir porque somos fiscales" dijeron los curas enviados por Francisco.
