Con casi 40 mil casos confirmados hasta la fecha, la comuna además mantiene el primer lugar en contagiados activos a nivel nacional, con 1491 confirmados a diferencia de Lo Barnechea 253 casos activos y 550 de Las condes, es decir 600 % y 300 % más contagiados que en las comunas del rechazo, ¿es el destino?, ¿casualidad? por supuesto que no.
Miércoles 31 de marzo de 2021
A nivel de regiones, el panorama es similar, según el informe epidemiológico de la última semana, la región con la mayor tasa de letalidad es la RM con un 3,5 %, y la siguen Rancagua con un 2,8%, luego Arica y Antofagasta con una tasa de mortalidad de un 2,4 %.
Esto no hace más que ratificar lo que hemos venido diciendo desde que comenzó la pandemia, que la responsabilidad por los altos índices de contagiosidad y muertes es fruto de la desigualdad social provocado por este sistema heredado de la dictadura y quienes lo sostienen, los empresarios y sus partidos, además han buscado conscientemente hacer recaer la crisis sobre los hombros de trabajadores, trabajadoras y sus familias.
Los muertos los pone la clase obrera
Mientras que en las 3 comunas más ricas de la región, el índice de muertes por covid es bajísimo en comparación al resto del país, en Puente alto y en todas las comunas obreras y populares nos enfrentamos a una realidad totalmente distinta, acá hay hacinamiento, mal acceso a la salud ,altísimos niveles de cesantía, trabajo informal, falta de áreas verdes etc
Las élites de este país y el mundo han tenido una línea, que ha causado efecto en un sector de la población, de recriminar a los sectores populares por ser los supuestos culpables por nuestra “porfía e irresponsabilidad”, de la aguda crisis sanitaria que enfrentamos. Sin embargo esa cantinela es absolutamente maliciosa ya que la principal causa de rotación de la gente por la ciudad es por motivos laborales, viajamos atochados en las horas punta a nuestros lugares de trabajo y quienes no tienen empleo, salen a la calle a buscarlo o a vender golosinas para seguir parando la olla, ya que estos bonos focalizados, lastimeros y vergonzosos del gobierno no hacen más que mantener la pobreza.
Estos planes que sale Piñera a ofrecer en cadena nacional, son una vergonzosa limosna, para un país con casi 14 millones de familias asalariadas, donde solo 10 familias, si 10 familias, concentran casi el 10% del PIB total del país, en 2020 el PIB alcanzó los USD$300.000 millones y los luksic, Piñera, Angelini, Ponce lLerou y compañía hacían la no despreciable suma de USD$ 27.000 millones durante el mismo periodo.
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Mientras tanto el vocero de gobierno Bellolio plantea en la prensa que han desarrollado un “plan robusto” en materia de compensaciones económicas, que “sin duda quisieran que fuera mayor”, pero que los recursos del estado “son limitados”, y una larga lista de excusas para cuando se trata de equilibrar la balanza. Ante esto podríamos decir, que un sentido el “honorable” tiene razón, ya que si, ha sido un plan robusto de compensaciones económicas pero para el gran empresariado, y claro, los recursos son limitados, pero para el pueblo trabajador. Y es eso lo que justamente tiene que cambiar, pero con los capitalistas en el poder es imposible, hay que derribarlos, para eso nos preparamos en el PTR para que gobierne el pueblo, las trabajadoras y trabajadores
No solo durante sino que gracias a la pandemia
No solo durante sino que gracias a la pandemia, la riqueza de las 10 familias aumentó casi un 25% y ¿por qué? porque pudieron despedir sin pagar finiquitos con la ley de suspensiones, (la famosa “ley de protección del empleo”), lo cual es un gasto importante menos. Por otra parte obligaron a quienes quedaron trabajando a que 1 haga el trabajo hasta de 3 personas, con la figura de “colaborador multifuncional” del retail por ejemplo, lo cual maximiza la ganancia empresarial, al producir lo mismo e incluso más para un costo mucho menor.
Como buenos representantes políticos de su clase, Piñera y la derecha buscaron proteger el bienestar económico y social no de “toda la nación” como les encanta vociferar, si no de su clase, los empresarios, las grandes fortunas, y los transnacionales. Es lógico que hagan eso, porque son parte de esas grandes fortunas y sus familias, justamente es por eso que no podemos esperar nada de ellos para el pueblo trabajador. Cuando los trabajadores gobernemos también buscaremos asegurar a los nuestros, pero la gran diferencia, es que “los nuestros”, son los pensionados que viven en la miseria, las trabajadoras de la primera línea contra el covid, los niños y niñas del SENAME, la juventud migrante y nativa que trabaja de repartidora, los nuestros son quienes están presos por luchar, quienes viajamos como ganado día día al trabajo, y volvemos del mismo modo a nuestros hogares llevando el virus desde las comunas ricas.
Somos la gran mayoría de la población, los que estamos pagando el peso de esta crisis para que los señores se den la gran vida, los muertos señor Bellolio, son nuestros, los suyos, se dan la gran vida. Por eso la impotencia y la rabia, por eso la necesidad de darlo vuelta todo.
