Pese a los millonarios ingresos percibidos por el Centro Cultural Gabriela Mistral, sus trabajadores no tienen derechos básicos garantizados. Sin embargo, este caso no es aislado, como antesala al Gobierno de Piñera, se vienen desarrollando distintos conflictos en el país.

Simón Bousquet Director Audiovisual La Izquierda Diario Chile @simonbousquet_

Claudia Ochoa García Secretaria Sindicato GAM
Jueves 8 de febrero de 2018

Chile, un país de altas ganancias
El país cruza por un buen momento económico, ligado a un alto precio del cobre y con un índice de crecimiento favorable, manteniéndose la demanda del metal rojo, por parte de importantes países como China.
Bajo este marco, el aporte del Consejo nacional de la cultura y las artes al Centro Cultural Gabriela Mistral, según el último convenio realizado con la Corporación asciende a 2900 millones para 2017*. El financiamiento estatal del edificio asciende a un 68% del total, mientras que la cifra “faltante” es generada con arriendos de espacios y alianzas con privados. De esta cifra, 490 millones son destinados únicamente a sueldos de jefes y directores, que van desde los 2 a los 6 millones de pesos. GAM es una gran maquinaria de prestigio, por lo que da la impresión de que trabajamos para posicionar personalidades del “mundo de la cultura” y no con el fin de entregar la cultura a todos y todas.
Mientras estas elevadas cifras muestran enormes posibilidades para la expansión cultural del país, los directores del centro cultural tienen objetivos claros: Mantener sus puestos el mayor tiempo posible, usando a GAM como una plataforma de lobby.
Como si esto fuera poco, y con la mayor de las tranquilidades, los directores del GAM, se asignaron los mismos cheques de restaurant que nosotros exigimos en nuestro acuerdo colectivo de beneficios, pasando por encima de dicho acuerdo y haciendo uso de una asignación que era exclusiva para los trabajadores.
No hay dinero
Mientras esto pasa: Las mamás trabajadoras que presentaban justificación médica indicando que sus hijos no podían ir a sala cuna, solo percibían el 50% del concepto de bonificación. Además, el monto de sala cuna debería ser acorde a los precios de las salas cunas del sector, además de la reajustabilidad por año. Esto, en el mejor de los casos, ya que son trabajadoras de planta: para las trabajadoras migrantes subcontratadas del aseo, es incluso peor. Con suerte perciben $70.000 de sala cuna, lo que es una incongruencia con el discurso inclusivo que se levanta en el GAM, que ostenta orgullosamente un #Niunamenos en el frontis del edificio.
Sumado a esto, la postergación de las respuestas sobre aumentar las contrataciones se traduce en altas cargas laborales, precarizando a la mayoría.
Lo que nosotros pedimos es simple, si hay dinero para pagar altos sueldos, ¿por que no pueden cubrir las necesidades mínimas que estamos exigiendo?
Sindicato GAM
Por todo lo anterior, desde el jueves pasado se viene desarrollando una movilización en el centro cultural, impulsada tanto por el sindicato de trabajadores GAM como por la comisión de mujeres, en torno al petitorio que elaboraron en asamblea. Y que ha sido apoyada por distintas organizaciones políticas y sociales, como NO+AFP , Pan y Rosas y los estudiantes de Vencer. Los obreros de la construcción de la segunda etapa del GAM, afiliados al SINTEC también se hicieron presentes.
La tarea es fortalecer nuestro sindicato, organizando a la mayor cantidad de trabajadores y trabajadoras, para que nuestros derechos se respeten, como por ejemplo, el derecho mínimo a negociar colectivamente.
Unidad de todas las luchas
Que hoy exista un conflicto en el GAM no lo hace un caso aislado. Como antesala al gobierno de Piñera, se vienen desarrollando distintos conflictos de trabajadores en el país. En Antofagasta, los despidos en el Ferrocarril, en Orica y docentes, muestran que los empresarios y gerentes envalentonados, junto a la derecha, se preparan para un escenario de mayores ataques para los trabajadores y grandes ganancias para ellos. Si bien en el GAM el directorio pertenece a la Nueva Mayoría, viene haciéndole guiños a la derecha y se muestra dispuesto a aceptar el plan cultural de Piñera. Este año, las y los trabajadores debemos enfrentar unidos estos ataques, proponiéndonos cambios más profundos como: fin al subcontrato, reducción de la jornada laboral, no más precarización a la mujer trabajadora ni despedidos por organizarse. Esta es nuestra principal campaña.
Aunque Piñera diga que se vienen “tiempos mejores”, sabemos que no es así. El Frente Amplio dice que será la oposición a la derecha, representando a los movimientos sociales: es por eso que le exigimos solidarice con la lucha de la mujer trabajadora en el GAM, contra los despidos por organizarse en el Ferro, Orica y el Liceo Cariola de Antofagasta. Frente Amplio tiene representación en el Sindicato de Actores (SIDARTE) con participación en el directorio del propio GAM. Estos actores deben ponerse a disposición de estos problemas para no dejar pasar los intentos de la derecha y ponerse del lado de los trabajadores y la necesidad de un arte de libre acceso para todos y todas.
*Todas las cifras fueron sacadas de la pagina de transparencia de GAM