El gobernador bonaerense viajó para la asunción de la presidenta Sheinbaum y aprovechó para reunirse con funcionarios del nuevo gobierno mexicano, firmando un acuerdo para la cooperación en el desarrollo industrial del litio. También mantuvo un encuentro con Lula Da Silva y brindó una conferencia sobre “perspectivas económicas posneoliberales.” ¿Qué se trae?
Sábado 5 de octubre 21:00
Durante la semana que pasó, Axel Kicillof viajó a México para la asunción de la presidenta Claudia Sheinbaum, a la que se ausentaron el presidente Javier Milei y representantes del gobierno nacional. Allí estuvieron otros mandatarios cómo el presidente brasileño Lula Da Silva, con quien también tuvo una reunión durante su estadía. Además brindó una conferencia sobre “Perspectivas económicas posneoliberales en América Latina”, en el Centro de Investigaciones y Docencia Económica de México.
Tras las reuniones con funcionarios para promover inversiones mexicanas en la provincia, Kicillof brindó muchos elogios hacia las gestiones del gobierno saliente de Lopez Obrador, cómo de su actual sucesora. Según un comunicado en el sitio oficial de la provincia, el gobernador habría dicho que “Lo que está ocurriendo en México es exactamente lo contrario a lo que sucede en la Argentina: aquí hay un Gobierno nacional que impulsa el desarrollo, la inclusión y la integración regional”, destacando que de las distintas reuniones que tuvo notó que “hay un gran interés por nuestro país, a pesar de las políticas de un Gobierno argentino que ha decidido darle la espalda a Latinoamérica”.
El acuerdo firmado para la coordinación de estudios e investigaciones entre la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) de la provincia de Buenos Aires en materia de investigación y desarrollo de la cadena de valor del litio, con la empresa estatal Litio para México (LitioMx), fue de lo más destacado por el gobernador, según los comunicados.
El acuerdo consta de un financiamiento con capitales extranjeros de lo que ya se viene desarrollando con la planta de Y-Tec y la planta de baterías de la Universidad de La Plata (UNLP) que están funcionando, y la coordinación de las investigaciones entre la empresa estatal mexicana y el centro de investigación bonaerense, dicen sus impulsores, que serviría para “transferir experiencias”.
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Tras el acuerdo, el gobernador dijo que se trataba de un convenio que involucra a investigadores mexicanos y bonaerenses y que será financiado por el Banco de Desarrollo de América Latina y El Caribe, siendo éste, el primer acuerdo de la CIC con financiamiento externo, y que serviría al desarrollo de los países y no de los especuladores, además de aportar a la reducción de la emisión de gases CO2.
¿Desarrollo y cuidado ambiental, o qué?
Esas investigaciones que son presentadas por el gobierno provincial cómo una defensa del ambiente ante la crisis climática que Milei niega, no es más que la planificación para industrializar el litio que se extrae desde 1988 en el norte argentino, que es parte del triángulo del litio donde se estima que hay un 10 % del total de dicho mineral de todo el mundo.
Actualmente, esas reservas son explotadas por empresas multinacionales que desalojan de sus tierras ancestrales a las comunidades indígenas que resisten los ataques de las empresas mineras que buscan expandir y profundizar su negocio. Pero también de los gobierno de sus provincias que favorecen los negocios, reprimiendo y desalojando a quienes habitan y defienden esos territorios del saqueo extractivista y la destrucción ambiental que hasta el momento no ha dejado más que miseria y precariedad laboral cuando no desempleo, mientras esas multinacionales amasan fortunas y se las llevan a sus casas matrices o cuentas en paraísos fiscales.
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Mas allá de las diferenciaciones con Milei y la supuesta contribución a paliar la crisis climática y desarrollar la industria para generar empleo, se trata del mismo plan para “re-primarizar la economía” saqueando los bienes comunes naturales, desalojando a las familias de sus territorios y beneficiando a multinacionales que mandan sus ganancias a sus cuentas en el exterior o generando algunas divisas que van pagar la deuda ilegal con el FMI.
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La búsqueda de inversiones, por más tintes progresistas que disfracen los acuerdos que se firmaron, apuntan a un bien natural que se encuentra en grandes cantidades en el norte argentino, y que se disputan desde Elon Musk y Milei, hasta gobiernos cómo el de México que busca desarrollar la industrialización de dicho mineral, pasando por otros tantos interesados en hacer negocios con el cambio de matriz energética.
Es sabido que el calentamiento global requiere de una renovación de la matriz energética y reconversión de las industrias para revertir la crisis climática en curso. Pero no va a ser de la mano de los negocios capitalistas y sus gobierno, ya sean negacionistas como el de Milei, o con rasgos progresistas cómo el de México al que el gobernador reivindica, los que están bregando por que esto suceda. Al menos así lo vienen demostrando hace décadas, en que el extractivismo viene arrasando todos los rincones del planeta con el único fin de aumentar sus ganancias y privilegios, dejando muerte y destrucción en los pueblos y grandes ciudades.
Estos anuncios que buscan promover las “Perspectivas económicas posneoliberales en América Latina” tratando de recrear la situación de principios de siglo, cuando el crecimiento a tasas chinas en la región favoreció las economías de la región ,pero que en la actualidad se chocan con un mundo completamente distinto, con guerras en ascenso, crisis económica, ampliación de la brecha social entre los más ricos y los cada vez más pobres.
Si la precarización de la vida, la fragmentación social, la pobreza, y también la destrucción ambiental, son problemas estructurales que dejó el neoliberalismo, hay que decir que los gobierno posneoliberales lejos que buscar revertirlos, aún con tasa chinas, los mantuvieron. ¿Cómo creer, entonces, que la misma política pueda funcionar sin ni siquiera dicho crecimiento?
Es preciso que las comunidades que resisten el saqueo extractivista en toda Latinoamérica y el resto de los territorios del mundo, se organicen en unidad con los trabajadores de dichas empresas y de todos los sectores tomando en sus manos y con sus métodos la defensa del ambiente, la salud y condiciones de vida, junto a los científicos e investigadores que defienden el ambiente y resto de la comunidad que se organice para expulsar a las multinacionales, nacionalizando las plantas bajo control de trabajadores y esa alianza con la comunidad, y promover dicha reconversión industrial que sea amigable con los diversos ecosistemas y al servicio del bienestar de las mayorías.
Julián Rodriguez
Trabajador judicial en La Marrón Clasista @JuYu666julianyu