Segunda Convención Nacional de Afores. Empresarios y funcionarios se congratulan de financiar negocios privados y obra pública con ahorros de trabajadores. Quieren aplicar esos fondos a la reconstrucción, mientras a los damnificados los obligan a tomar préstamos a 9% para financiar arreglos de sus viviendas afectadas por los sismos.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Martes 31 de octubre de 2017
“El Aporte de los Programas de Capitalización en la Construcción de la Pensión: desafíos y propuestas” es el tema con el que empezó esta Convención organizada por la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore) y la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP).
Vanessa Rubio, subsecretaria de Hacienda y Crédito Público, y Guillermo Arthur, presidente del Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP), inauguraron la convención.
Según las autoridades, desde 1997 hasta ahora, “el ahorro para el retiro en las Afores ya alcanzó el 15% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que contribuye a mejorar el desarrollo económico y productivo del país y darle profundidad y estabilidad al mercado financiero”.
Carlos Noriega Curtis, presidente de la Amafore, subrayó que este sistema “ayuda a financiar grandes proyectos de inversión en el país que se traducen en mayores empleos, viviendas, carreteras, escuelas y hospitales y en la actualidad podría contribuir a la reconstrucción luego de los sismos registrados en septiembre pasado”.
Según la subsecretaria Vanessa Rubio, el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) es uno de los “baluartes de la estabilidad financiera” y “uno de los pilares de fortaleza de la estabilidad macroeconómica”. Afirmó también que no se podría “concebir la implementación de las reformas estructurales si no existiera este ahorro que manejan las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), que supera los tres billones de pesos, y la inversión de este recurso en proyectos productivos.”
Por su parte, Carmen Pagés, del Banco Interamericano de Desarrollo, resaltó “El país donde el sistema de pensiones en el esquema de beneficio definido está más subsidiado es México, donde se destinan 230 dólares por persona; en promedio en Latinoamérica se dan 81 dólares por persona”.
La funcionaria apuesta a la presión: “Si no se hacen cambios, la tasa de reemplazo –el porcentaje de ingresos en la jubilación respecto a los ingresos previos como trabajadores en activo– puede bajar de 44% a 10% sobre todo ante el cambio demográfico. Hay tensiones muy importantes que requieren ajustes y eso se debe lograr con acuerdos entre gobierno, administradoras e instituciones multilaterales”.
Las afores: vampiros de los ahorros de los trabajadores
Miriam Hernández, trabajadora de la UNAM, consultada sobre esta convención, declaró “La voz de las afores se alza para que se les garanticen más ganancias a costa de especular con el dinero del retiro de las trabajadoras y los trabajadores.
Recordó que desde 1997 el sistema de pensiones del Instituto Mexicano de Seguro Social se transformó de un esquema de reparto a uno de cuentas individuales."
“Ése es el inicio de la crisis actual de las pensiones” afirma Miriam Hernández.
Explicó “Las primeras generaciones que se jubilarán con el sistema de cuentas individuales, entre este año y el siguiente apenas cobrarán un salario mínimo. Esto los que reciban pensión. A mi generación, y a los más jóvenes nos irá peor. Otro hecho muy grave es que hoy 57% de la fuerza laboral está empleada en el sector informal, por lo cual no cobrará pensión”.
Empresas y autoridades lucran con las pensiones
Miriam Hernández, quien labora en la Biblioteca Central de la UNAM, muestra su indignación “Usan nuestro dinero para el retiro no para dar pensiones a los trabajadores retirados, sino para financiar los proyectos empresarios beneficiados con los contratos de obras públicas. Ahora hasta afirman con total impunidad que se puede usar para la reconstrucción de la infraestructura colapsada o afectada por los sismos, mientras la ayuda a las familias damnificadas no llega, o les ofrecen préstamos con tasas de interés de 9% para acceder a nuevas viviendas o hacer las reparaciones en los casos que quedaron dañadas”.
Sobre la reconstrucción, afirma "Del no pago de la deuda externa, de impuestos progresivos a las grandes fortunas como Slim, de la reasignación de fondos desde los exorbitantes gastos gubernamentales o desde los recursos de las fuerzas represivas, de ahí debe salir el dinero para reconstruir la infraestructura dañada con los sismos, no de las pensiones".
Más adelante, señala "Con el ahorro de las trabajadoras y los trabajadores para su retiro también se juega en la ruleta financiera. Si las acciones o los bonos en los que las afores ‘invirtieron’ pierden valor, hay minusvalías (pérdidas), que se descuentan de esos ahorros. Si sube el valor de las acciones o los bonos, se registran ‘rendimientos’. Pero siempre, pase lo que pase, las afores cobran sus comisiones, que en promedio representan 1.06% del monto de la cuenta de ahorro que resulta de restar las minusvalías a los rendimientos.”
Consultada sobre el tema del aumento de aportes a las afores, Miriam Hernández declaró “Es indignante esta exigencia de Amafores. Hay que impedir este nuevo atropello del gobierno y los especuladores. Ya han impuesto en algunos sectores la edad jubilatoria a los 65 años. Ahora quieren expropiar una porción mayor de los salarios, que se cuentan entre los más bajos del mundo.”
Como salida ante la crisis de las pensiones, propone “Tenemos que luchar por el derecho a una pensión digna. Contra la división impuesta por el gobierno y los charros de los sindicatos, los trabajadores sindicalizados, los subcontratados, los de nómina, quienes trabajan por honorarios, los de confianza, los del sector informal, tenemos que unirnos. Los socialistas del MTS consideramos que esta movilización debe luchar para que los fondos de pensión sean estatizados bajo la administración de los trabajadores activos y en retiro, organizados de manera democrática”.