Hasta el momento se estima que van 34 personas asesinadas por agentes de las Fuerzas Armadas a nivel nacional.
Sábado 23 de diciembre de 2017
Esta semana, la población de Honduras enfrenta una escalada represiva que se ha cobrado la vida de al menos 34 personas. En semanas anteriores, el gobierno negoció con la unidad especial llamada los “Cobras” quienes aparecían ante los medios a nivel nacional e internacional como “garantes de la protesta” mediante una seudo “huelga” de brazos caídos.
La acción dividió opiniones. Sin embargo, éste y los nueve grupos de la policía nacional junto con las Fuerzas Armadas hondureñas no han detenido su accionar contra la población, descargando un ataque brutal contra a la juventud y periodistas en todo el país y mostrando su carácter de clase alineado al gobierno y a los interese de la clase empresarial del país centroamericano.
Así, los “Cobras” negociaron con Juan Orlando Hernández el aumento al presupuesto del conjunto del aparato represivo del Estado por una suma de 7.5 millones de dólares (179 millones de lempiras). Fue el costó de la represión que se ha desatado contra mujeres, jóvenes y familias en los barrios y territorios de Honduras, contra la población que resiste el fraude electoral del gobierno y de las autoridades del Tribunal Supremo Electoral.
Algunos medios y figuras del periodismo señalan que el gobierno ha agotado los suministros de gases lacrimógenos que utilizan para repeler las movilizaciones en varios puntos del país. Katia Lara, cineasta y documentalista hondureña, cuyo último material documenta el asesinato de la luchadora social Berta Cáceres, explicó en una entrevista:
La cacería que hubo en el toque de queda fue más grave que en el golpe de Estado de 2009.
Según Amnistía Internacional, mientras las autoridades confirmaron sólo tres fallecidos. Nasralla reportó el pasado martes 24 muertos, que atribuyó a “la policía militar fundada por el presidente Hernández”. Organizaciones sociales y de Derechos Humanos aseguran que por lo menos se reportaron 34 asesinatos, entre los que se encuentra una joven de entre 14 a 16 años en Choloma, al norte de Honduras y cientos de detenidos.
Por su parte, Juan Orlando Hernández, nombrado como vencedor de las elecciones por el Tribunal Superior Electoral durante el fin de semana pasado, se prepara para dar continuidad a su gestión con un llamado para iniciar un “diálogo nacional”. Según los medios locales las bases para este “diálogo” se están gestando junto con sectores de empresarios, cooperativas, representantes de la confraternidad evangélica y episcopal.
Es fundamental levantar la solidaridad con el pueblo y la resistencia hondureña, contra la represión y el aumento de la militarización, así como fortalecer la movilización y unidad de todos los sectores en lucha que se oponen al fraude electoral.
