El 17 de noviembre comienza formalmente la quinta ronda de renegociación del TLCAN con sede en la Ciudad de México.
Jueves 9 de noviembre de 2017
Tras la cuarta ronda de negociaciones del tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) celebradas en Washington del 11 a l 17 de octubre, los gobiernos de Estados Unidos, Canadá y México se preparan para continuar la quinta ronda de negociaciones.
En principio se había planteado que si bien la sede fuera la Ciudad de México, la quinta ronda arrancara del 29 al 2 de noviembre, sin embargo, se ha decidió aplazar la quinta ronda hasta el 17 de noviembre por las duras negociaciones que se dieron en la cuarta ronda frente a la intresgencia de un imperialismo que no piensa renegociar el TLCAN si no saca el mayor provecho posible.
Aunque desde el 15 de noviembre comenzarán mesas de trabajo, oficialmente la quinta ronda será del 17 al 21 de noviembre.
Se prevé que al final de la ronda se ofrezca una conferencia de prensa con la presencia d Ildefonso Guajardo, secretario de economía de México, Chrystia Freeland, ministra de relaciones exteriores de Canadá y Robert Lighthizer, representante comercial de Estados Unidos.
El imperialismo quiere sentar las bases de una explotación más rapaz hacia México y uno de los puntos clave de los desacuerdos es la exigencia de Washington para aumentar las cuotas de productos fabricados fuera de Estados Unidos, particularmente de la industria automotriz, una de las pequeñas “joyas” que el gobierno de Enrique Peña Nieto Conquistó a partir de ofrecer uno de los salarios más bajos a nivel mundial como punta de lanza para atraer inversión del sector, además de las decenas de facilidades que el gobierno ha dado para que las trasnacionales se establezcan principalmente en el bajío pero también en los estados del norte del país.
Un segundo aspecto que no le cierra a la burguesía mexicana y al gobierno es una nueva cláusula que el gobierno norteamericano quiere imponer, esta cláusula abunda sobre la renovación de inversiones cada determinado tiempo, estableciendo como propuesta la renovación de las inversiones en periodos de cinco años y aunque hay sectores empresariales estadounidenses que no ven con buenos ojos esta propuesta, ya que implicaría un factor de volatilidad en sus nichos de inversión, para el gobierno de Trump es fundamental seguir poniéndola sobre la mesa ya que la cláusula va en concordancia con sus promesas de campaña: regresar las fuentes de trabajo a Estados Unidos, es decir hacer lo menos constantes las inversiones en suelo mexicano.
Por las premuras que implican las coyunturas electorales tanto en México (elecciones presidenciales y diputaciones) como en Estados Unidos (Cámara de representantes y un tercio del senado se renuevan) se ha puesto sobre la mesa la necesidad de tener una sexta ronda de negociación del TLCAN antes de que termine el año.
Más una ronda formal, la seta ronda pretende ordenar la discusión del 2018, ya que, cómo ha recalcado los tres gobiernos, las rondas de negociación del TLCAN no tienen una fecha límite. La sexta ronda se piensa llevar a cabo en Washington con fecha aún por definir.
