×
×
Red Internacional
lid bot

Tribuna Obrera. [RANCAGUA] Reflexiones de un trabajador despedido en medio de la pandemia

Ya quedo claro que esta crisis quieren que la paguemos no solo con nuestro sueldos, sino ademas con nuestras vidas. Dejamos estas reflexiones de un trabajador despedido en medio de esta pandemia

Lunes 11 de mayo de 2020

La crisis laboral ha demostrado la avaricia de los empresarios, en los últimos meses se han perdido cientos de miles de empleos y nos hace preguntarnos ¿que está pasando? Es el virus covid-19 o el estallido del 18, o simplemente un gobierno incompetente ante la realidad, lo que sí sabemos es que hemos sido duramente golpeados en estos últimos 6 meses, más que nunca, es algo que estamos viviendo in situ y por primera vez, como clase trabajadora vemos con mucha incertidumbre y recelo este oscuro y desamparado camino que tenemos por delante.

Esto mismo es lo que tiene que motivar a las personas a no dar su vida por un lugar de trabajo, que es más lo que quita, de lo que da, a invertir tiempo y recursos en nosotros mismos para que podamos pensar en un futuro en donde seamos nuestros propios líderes.

Qué raro, difícil e irónico es usar hoy por hoy una mascarilla para protegernos, para cubrir nuestros rostros llenos de impotencia, malestar e incomodidad ante un paupérrimo y desigual manejo de la crisis sanitaria, este escenario se suma a ya otros problemas arrastrados del pasado.

La clase obrera lamentablemente no puede tener tele-trabajo, eso es para quienes dirigen una obra o solo mandan, no hay un respaldo para quienes no cuentan con un cartón universitario, al momento de pensar como llevar el pan a la mesa no hay más que incertidumbre, ¿cómo hacer para que nuestros hijos no se vayan a dormir con el estómago vacío?, son estas las preocupaciones que tiene la gente sin recursos, que cruel e injusta es esta cuarentena clasista.

Sin las condiciones necesarias y óptimas para un retorno seguro a las aulas, este gobierno corrupto y mafioso, pretende mantener a toda costa el negocio estudiantil, sin contar con las medidas mínimas de salubridad que demanda esta crisis sanitaria, ¿volver a clases? Con niños que no entienden que no pueden tocar o abrazar ni jugar, con salas que se usan para 40 alumnos porque no hay más espacio, ¿donde pondremos al resto de los alumnos si no existen las infraestructuras adecuadas para tal gestión?, ¿quien decide a que niños se les dará la oportunidad de estudiar?, tanta prisa solo logrará exponer a nuestros hijos.

Hoy una pequeña parte de la población, la mas acomodada, tienen la posibilidad de tener clases online, tienen una mega banda ancha para buscar información y poder desenvolverse como corresponde en el mundo digital, los miles de niños de zonas rurales y de extrema pobreza no cuentan con estas condiciones mínimas, ni siquiera cuentan con un televisor y van a tener un computador, y es más, podemos entender que se puede resolver un poco la brecha tecnológica y de ambiente de estudio volviendo a clases, pero las condiciones no existen, el hacinamiento y la crisis de la educación pública pasan la cuenta, ni siquiera el colegio de profesores sabe el plan de estudios que impuso el gobierno y si no consideran a los profesores imagínense en qué nivel se encuentran los alumnos y apoderados, tenemos que tener la claridad de que este gobierno criminal y mentiroso no tiene al pueblo como prioridad. Por mi parte y así muchos, doy perdido el año para mis hijos.

Crisis familiar, un amplio concepto para tan pocos metros cuadrados en una superficie legal para zonas urbanas de 300 m2 con un mínimo de 100 m2 en zonas más pobladas, la mayoría vive en casas de 59,7 m2 construidos, familias de 5 personas con un solo baño, termina siendo hacinamiento. La cuarentena es un martirio, la falta de espacio nos conlleva nuevamente a darnos cuenta de la enorme diferencia social.

Son tantos los problemas, que nos exige unidad y repensar esta vida que vivimos, es hora de cambiarlo todo.