Un nuevo estudio de la Fundación Sol analiza la última encuesta Casen para buscar la respuesta a la interrogante ¿Quiénes ganan el salario mínimo en Chile? El estudio entregado hace unos días y elaborado durante septiembre deja al descubierto una cruda radiografía de la realidad de los salarios en el país.
Viernes 9 de octubre de 2020
En el marco de la discusión en torno al aumento del sueldo mínimo en el país, un nuevo estudio de la Fundación Sol plantea una serie de resultados que dejan en evidencia el atraso salarial en Chile y que los bajos salarios es un problema generalizado. El estudio se realiza en base al análisis de los datos entregados por la última encuesta de Caracterización Socioeconómica (CASEN).
Dentro de las conclusiones más relevantes destaca que en Chile 890.573 personas ganan el salario mínimo o menos, y un 70% de los trabajadores y trabajadoras del sector privado recibe por salario menos de 450 mil pesos mensuales. Si pensamos que para salir de la pobreza en Chile el promedio de sueldo necesario para una familia de 4 integrantes es aproximadamente de 680 mil pesos, todas las familias que se mantienen con el salario de sólo uno de sus integrantes se ven totalmente imposibilitadas de salir de la condición de “pobres”. Solo 1 de cada 3 trabajadores en el país gana más de 400.000 pesos al mes.
Un 56 % de los trabajadores y trabajadoras que ganan el salario mínimo o menos, se encuentran en la Agricultura, Industria Manufacturera, Servicio Doméstico y el Comercio, varios de estos rubros altamente feminizados, donde altos porcentajes son también mujeres jefas de hogar como es el caso del comercio.
Por otra parte, un 34.8% de los jóvenes entre 15 y 19 años dependiente del sector privado ganan el salario mínimo o menos. Es decir, los sectores más vulnerables de la población como las mujeres y la juventud son los peores pagados.
Mientras esta radiografía deja al descubierto el crítico panorama al que nos vemos expuestos trabajadores y trabajadoras en torno a nuestras remuneraciones, entre el Gobierno y el Parlamento se discute subir el salario mínimo en miserables 6 mil pesos.
Todo esto mientras la inflación sigue al alza y acumula 3.1 puntos porcentuales más que hace 12 meses. Es decir, mientras el Gobierno y los políticos de los 30 años discutían subir miserablemente el salario, la comida y el costo de la vida sigue al alza. Por eso, hoy se vuelve más necesario que antes organizarnos para conquistar por ley la prohibición de los despidos y la fijación de los precios en alimentos y productos básicos, como también un sueldo mínimo por sobre la línea de la pobreza. Esto como un punto de apoyo para poder sobrellevar la enorme crisis económica que atravesamos pero en perspectiva de poder retomar nuevamente el camino de la movilización y lucha por la conquista de las demandas de Octubre.
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