Entrevistamos a C., un joven trabajador que da testimonio de las razias policiales en la Banda del Río Salí.
Martes 12 de abril de 2016
A tono con la política represiva del gobierno nacional que acompaña el ajuste en curso, la legislatura provincial se prepara para declarar la “emergencia en seguridad”, que le dará más poder, recursos, e impunidad, a las fuerzas policiales. Mientras tanto las razias se multiplican en los barrios del Gran San Miguel, abarrotando las comisarías de jóvenes que son detenidos por “portación de cara” en operativos con helicópteros que sobrevuelan los techos de las casas.
En la Banda del Río Salí los vigías municipales se han constituido como una verdadera fuerza parapolicial que en solo tres meses de existencia ya tiene a su jefe, Fabio Ferreyra, acusado por detener ilegalmente a dos motociclistas y torturarlos con picanas eléctricas.
En su cuenta de Facebook el intendente Darío Monteros publicó el pasado 9 de abril una felicitación al subcomisario Julio Lobo por un operativo conjunto entre policías, personal de tránsito, y vigías municipales, que terminó con 18 detenidos por contravenciones.
A continuación reproducimos el testimonio de C., un joven trabajador de la Banda del Río Salí.
LID: ¿Qué cambio en la vida de los jóvenes de la BRS con el arribo de los vigías?
C: Cambio demasiado en muchos barrios ya ni se puede disfrutar de los espacios verdes. Ven que se juntan cinco seis chicos y ya intentan disuadir para que se vayan o intentan detenerlos solo por juntarse a chalar o compartir un momento de dispersión. Los vigías te persiguen por jugar a la pelota en la plaza, te siguen hasta tu casa, así comenzaron. Luego los supuestos operativos se convirtieron en razias.
LID: ¿Cómo son los operativos?
C: Zapados. Motos , Trafic, patrulleros de la policía, hasta helicópteros. Te ven ahí parado en la vereda de tu casa, esperando el colectivo o volviendo de trabajar y te suben violentamente sin decirte nada a los móviles de los vigías o de la policía de Tucumán. No tenes ningún derecho y ellos te detienen por lo que ellos quieren. A unos chicos vecinos les paso eso. Eran todos menores de edad, a las 20 hs estaban armando una lista para jugar campeonato de futbol y se los llevaron con el argumento de que no podían estar en grupo. En la comisaria los desvistieron, golpearon y los tuvieron incomunicados negándoles hablar con algún familiar, les pintaron los dedos y les inventaron una contravención. Para salir tuvieron que pagar y al que no tenía la plata para pagar la multa se tenía que quedar cuatro o cinco días. Me contaban que adentro del calabozo las condiciones son de terror, habían chicos sangrando con heridas profundas por golpes de los propios policías que les negaban la atención médica. Por el hacinamiento y la superpoblación tenían que dormir sobre letrinas, se contagiaron de piojos, chinches.
LID: ¿Cuál pensas que es el objetivo de estas razias?
C: Si nadie se queja de estos abusos y si nadie se manifiesta en contra, nadie se va enterar de lo que pasa. Por eso no hay que callarse, sino el plan de Darío Monteros se va comenzar hacer en otros municipios de la provincia. Es como una prueba piloto de la que la policía saca provecho con sus negocios con los transas, las zonas liberadas, y llenando los calabozos e inventando contravenciones. Los jóvenes de la banda ya no salen como antes. Si vos escuchas un helicóptero que pasa alumbrando el fondo de tu casa lo primero que penas es en quedarte porque si salís te pueden llevar viendo cómo se manejan y la verdad es que da mucho miedo salir a conversar o hacer algún deporte en una plaza que es un espacio público.
LID: ¿Qué le dirías a los jóvenes que sienten día a día la brutalidad de este aparato represivo?
C: Que no tengan miedo, que conozcan sus derechos humanos y civiles. Algunos tienen la posibilidad de ir a la escuela, pero hay muchos que no y tienen que salir a trabajar desde chicos. Yo no voy a permitir que venga un vigía y me quiera revisar porque no lo pueden hacer.
LID: Este 18 de abril comienza el juicio por Ismael Lucena joven asesinado por la policía, ¿te parece importante participar de las acciones en tribunales exigiendo perpetua para los asesinos?
C: Me parece muy importante participar porque casos de gatillo fácil siguen habiendo por parte de la policía y si nosotros no nos paramos ahora y decimos “esto no tiene que pasar más”, va seguir pasando en mi barrio, en el tuyo, o en el de tu amigo. La policía viene de prepo y dispara. Todos los jóvenes deberíamos estar el 18 en los tribunales.