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Red Internacional
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Tres de Febrero. Reflexiones del Plenario Abierto

Sergio Randi, sociólogo y profesor de Historia, doctorante en el Posgrado de Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Nacional Autónoma de México, nos acerca sus reflexiones sobre el plenario Abierto de asambleas barriales, que se desarrolló el último sábado en Tres de Febrero, junto al obrero y militante de izquierda Raúl Godoy, para discutir cómo enfrentar el plan de ajuste de Milei.

Sábado 25 de mayo de 2024 11:28

El sábado 18 de mayo se desarrolló en Tres de Febrero un Plenario Abierto de asambleas barriales junto al obrero y militante de izquierda Raúl Godoy, para discutir cómo enfrentar el plan de ajuste de Milei. En la charla participaron diversos sectores de asalariados, como ferroviarios, docentes, jubilados, estudiantes. Las reflexiones que siguen son parte de la discusión que se dió el fin de semana pasado en este espacio para convocar a Plaza Congreso este 25 de mayo. El pueblo trabajador se va preparando para enfrentar las políticas de hambre y represión de Pettovello, Milei y el FMI. Las ideas también son un arma cargada de futuro.

El obrero ceramista Raúl Godoy a quien tuve la dicha de conocer en una charla que organizamos estudiantes del Instituto de Formación Docente Contínua El Bolsón cuando cursaba el profesorado de Historia, sostuvo el fin de semana pasado que “a todos nos une una preocupación que es la situación de crisis que se vive y pensar cómo salir para que nuestra lucha no sea en vano”.

Con estas palabras, el compañero Godoy señaló la necesidad de construir una alternativa de clase “para darle cauce a esas luchas y que otra vez no nos vuelvan a joder la vida”. El escenario político nacional, pero también a nivel internacional, transcurre por una crisis de “guerras y militarismo”, como la conflagración ruso-ucraniana que ya se convirtió en un grave problema humanitario. La actual avanzada militar de la entidad sionista sobre el pueblo palestino que comete crímenes de guerra y genocidio transmitido por “streaming”, mientras Netanyahu amenaza al fiscal de la Corte Penal Internacional que pidió su arresto, también es un signo de época. La ONU parece de cartón pintado.

En Argentina, estos coletazos guerreristas del capital se traducen en una fuerte avanzada represiva y criminalizadora a cargo de la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich. El show del “protocolo” con millonarios gastos en operativos represivos tiene su doble función, primero dar un mensaje a las empresas y a la burguesía de que el gobierno mantiene el orden y; segundo, dar un claro mensaje a todo aquél que se manifieste con la amenaza de su detención, represión cercenando el derecho a la protesta en el espacio público.

La miseria que viven los laburantes, a quienes orillan a situaciones de precariedad entre tener que comer, pagar el alquiler o el transporte u otros servicios en manos de monopolios, es algo característico de la situación actual, pero muchas cosas se vienen arrastrando desde gobiernos anteriores y el progresismo no quiso o “no pudo” modificarlas.. El compañero ferroviario que se expresó en el Plenario mencionó la situación por la que pasaba teniendo que “optar” entre comer o pagar un alquiler- aún estando él con un buen salario en comparación con otros sectores. Es lamentable que alguien que trabaja no pueda ni siquiera sobrevivir con su salario donde el único precio que no se actualiza es el de la fuerza de trabajo, lo que demuestra que somos población sobrante o “ejército de reserva” para la explotación capitalista. El “capitalismo eficiente” que gustaba llamar la vicepresidenta del gobierno anterior, ya no garantiza -al menos para más del 50% de la población argentina- las condiciones de existencia necesarias para reproducirse como fuerza de trabajo. Esto sin mencionar que los laburantes también tenemos otros derechos como tener acceso a la cultura, el vestido, el techo, el ocio, o condiciones de “vida digna”.

La avanzada brutal del capital sobre los trabajadores y los derechos que fueron adquiriendo con años de lucha, empuja a los laburantes a la precariedad, al trabajo informal, al hambre, a realizar changas por dos mangos sin ningún derecho. La falta de alimentos en los comedores populares es una forma de extorsionar a las organizaciones que luchan.

La Ministra de “Capital Humano” -vaya oxímoron si los hay- Sandra Pettovello, con una licenciatura en “Ciencias para la Familia” de una universidad privada perteneciente al Opus Dei, parece no tener la sensibilidad para escuchar a las familias de abajo. Llama a los sectores más vulnerables y explotados a formarse “individualmente” -las “filas del hambre” señalan los medios- para resolver la situación alimentaria y se ríe de ellos cínicamente, dado que a pesar de la larga fila que se forma no los atiende. Este jueves se conoció además a través de distintos medios que existían cerca de 5 mil toneladas de alimentos guardadas en galpones que el gobierno se negó a distribuir a los comedores populares llamándolos “fantasma” y jugando a auditar el hambre del pueblo. Si esta acción de la ministra Pettovello -quien militó en las filas de la Ucedé desde su juventud-, de hambrear al pueblo trabajador intencionalmente, no despierta la conciencia de los de abajo y los sectores medios empobrecidos para organizarse, verdaderamente no sé qué otro tipo de agravio más profundo podría encender la indignación o la rebelión popular.

En otro contexto, en Filo de la UBA, Castillo - profesor y diputado del Frente de Izquierda y el PTS- aseveró en la charla hace un par de días, que se nos aplica una “represión de clase”, que el sábado pasado llamé “justicia” de clase; pero está claro que es una instrumentalización del sistema judicial para criminalizar y al mismo tiempo -como mencionó otro compañero- estigmatizar al pueblo trabajador ocupado y desocupado y a los que se organizan y luchan.

Queda claro que esta es una estrategia del gobierno para perseguir y estigmatizar a aquellos que osan hacerle frente, criminalizar y judicializar la protesta con una contrarreforma de las leyes penales a la medida de las necesidades punitivas de la burguesía -como señaló la compañera Bregman- y las multinacionales, para imponer este plan de saqueo tanto de nuestros bienes comunes naturales como de todos nuestros derechos y libertades civiles y políticas. Es decir, un nuevo régimen colonialista y autoritario.

Creo que en estos meses de gobierno de Milei -aunque ya existían desde antes- se
profundizaron en el escenario político con mayor claridad ciertas dinámicas de fascistización. Con esto quiero decir que es un gobierno de clara orientación autoritaria. Milei con su Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) está realizando un cambio constitucional por decreto de forma grotesca y no democrática, sin llamar a un proceso constituyente, por lo que además con las facultades delegadas se termina de convertir en un déspota.

Aunque coincido con el intelectual comunista Enzo Traverso en el término de “posfascismo” dado que la emergencia actual de la extrema derecha es diferente del fascismo clásico, se están presentando dinámicas muy claras que consisten en perseguir a los pobres o a “los de abajo” como las organizaciones sociales de distintas orientaciones políticas, llamar “zurdos empobrecedores” o “zurdos van a correr” a aquellos que se oponen a sus políticas, ver “comunistas” por todas partes. Reducir vía inflación y pisando los salarios obreros el precio de la fuerza de trabajo, dado que se niegan a homologar paritarias afectando claramente a los trabajadores; legitimar discursos de odio contra el movimiento LGBTTTIQ+, por ejemplo, como producto de ello se asesinó a tres mujeres lesbianas, en Barracas previo cierre del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI). O el despido de Diana Zurco, conductora transgénero del noticiero de la TV Pública hace pocas semanas. También el cierre de la Agencia Nacional de Discapacidad entre otras instituciones o el cierre de Télam y los despidos en medios públicos junto a la suspensión de todos los medios de comunicación públicos para su “reorganización” son una muestra de los sentidos políticos que van tomando las medidas gubernamentales. El gobierno ataca claramente a los asalariados y a los de abajo o aquellos que no encajan en su imagen de lo que es la “gente de bien”: empresario, blanco, clase media-alta y heterosexual y ahora con la intención de retroceder al siglo pasado poniendo en cuestión el divorcio, el matrimonio igualitario o la interrupción voluntaria del embarazo o la educación sexual en las escuelas.

Creo que el Plenario Abierto fue una buena iniciativa que hay que profundizar y ver también cómo enfrentar la contención de la burocracia, como bien señaló Godoy, para que los asalariados y el pueblo pasen por encima de esta posición desmovilizadora que lo que va a producir es la derrota de los de abajo. Como comentó Godoy hay que romper el círculo en el cual estamos encerrados entre la derecha rancia y neoliberal y el “mal menor” representado por el peronismo que nos trajo hasta acá. Hay que salir de ese círculo en que el liberalismo viene imponiendo sus recetas de precarización, miseria, y saqueo de bienes comunes naturales dado que “no hay planeta B, sin bienes comunes naturales tampoco habrá socialismo mañana”.

También Godoy reivindicó justamente a los pueblos originarios que habitan el territorio y que son los principales defensores de estos bienes que para ellos tienen un carácter no sólo material, sino cultural y espiritual. El pueblo-nación mapuche fue perseguido recientemente por el gobierno de Alberto Fernández mientras metía presas a mujeres y niñes. Los pueblos originarios de Jujuy se opusieron y se levantaron contra la represión del gobernador radical Gerardo Morales -cuyo objetivo, al igual que Milei, fue imponer una reforma constitucional provincial amañada, para profundizar el saqueo de los bienes comunes como el litio- bajo la consigna “arriba los derechos, abajo la reforma” reclamando la propiedad comunitaria de la tierra el año pasado. Por eso, reivindicamos también el derecho a la lucha y a la defensa del pueblo palestino, por el cual hoy se levantan en diversas universidades del mundo las y los jóvenes estudiantes apelando a un “alto al fuego ya” y a que paremos este genocidio. Esta incursión genocida y militarista por parte del Estado de Israel ya lleva en su cuenta más de 35 mil asesinatos -sin contar los desaparecidos que están debajo de los escombros- bajo las bombas y a cerca de 80 mil heridos y lesionados.

Es una orgía de crueldad que se manifesta al observar las dinámicas de fascistización a la que nos lleva el militarismo y la voracidad del gran capital, por eso la lucha por la liberación del pueblo palestino es la lucha por todos los pueblos oprimidos del mundo. Pero al mismo tiempo, es la lucha contra el gran capital monopolista que quiere hacer de Medio Oriente un nuevo territorio de despojo y saqueo por las grandes reservas petroleras que posee y el poder que conlleva su dominación geopolítica y económica.

Como dijo Castillo en Filo, los parlamentarios son útiles para difundir las ideas de la izquierda y el socialismo, al mismo tiempo que desenmascaran el plan de la burguesía, pero la verdadera organización y lucha está fuera del Congreso. Por eso me parece fundamental este Plenario donde participan desde jubilados, estudiantes universitarios, docentes, trabajadores ferroviarios y otros asalariados. Esta unidad y la lucha que nos convoca este fin de semana es también para poner en discusión la necesidad de un partido revolucionario, que se ponga a la cabeza de la lucha proletaria y popular, dado que de lo contrario las rebeliones serán desviadas de su objetivo, o se impondrán los planes de la clase dominante.

Creo que a casi seis meses de la asunción de Milei, la única conclusión que se puede sacar es que hay que coordinar la lucha obrera y popular con otros sectores que no son necesariamente de izquierda, más afines al peronismo, al anarquismo, a las izquierdas independientes o a aquellas personas y agrupamientos que no se definen aún por un horizonte pero rechazan el saqueo colonialista, la precariedad y el hambre a la cual nos quieren someter a puro discurso bravucón y represión institucional, o sea, creo es la única forma efectiva de enfrentarse al plan de gobierno, con un “frente único” de lucha donde coexistan diversas tendencias, coordinar hombro a hombro un frente de lucha, aunque hoy no todos se movilicen y sean adversarios político-electorales es una tarea que nos convoca con urgencia porque es necesario darle prioridad a la cuestión de clase. Los de abajo contra los de arriba, para construir al mismo tiempo nuestra fuerza anticapitalista y por el socialismo para el porvenir. Para estas tareas urgentes nos reuniremos este sábado 25 de mayo en Plaza Congreso, para construir y coordinar un plan de lucha hasta derrotar todo el plan Milei, los gobernadores y el FMI.