Para la mayoría de los santiaguinos la vida cambió radicalmente. 14 nuevas comunas pasaron a cuarentena restringiéndose la circulación y el uso del espacio público. El gobierno aprovecha el aumento de la delincuencia y el discurso “quédate en casa” para aumentar el control de la vida cotidiana como nunca antes se había visto.

Gabriel Muñoz Licenciado en Historia
Sábado 9 de mayo de 2020
La Región Metropolitana concentra el 80% de nuevos casos de contagio en los últimos tres días
Desde el fin de semana pasado se dispararon las cifras de contagio. La estrategia de manipulación de las cifras del Ministro Mañalich quedó al descubierto al ocultar el aumento de los contagiados, producto de la política restrictiva de test. Ante esto el Ejecutivo aprovechó para actuar decretando cuarentena comunal para 25 comunas a partir de las 22:00 del viernes 8 de mayo. Más de 5 millones de chilenos no podrán salir de sus hogares, no podrán utilizar espacios públicos y serán fiscalizados por personal de las FFAA y Carabineros. Quedan expuestos a multas y cárcel en caso de no contar con el permiso temporal que otorgan las Comisarías para abastecerse de alimentos y otras excepciones.
Una ciudad controlada por las FFAA y los Alcaldes
La capital de Chile se convertirá en una prisión domiciliaria para sus habitantes. Más de 75 mil efectivos rondarán las calles, con vehículos blindados y efectivos que contemplan “boinas negras”. Según el general Carlos Ricotti se designó oficiales enlace para tener comunicación y coordinación directa con los alcaldes, para decidir qué puntos se controlarán por las 760 patrullas, que serán móviles para evitar la evasión de los “delincuentes”. Según el ministro de Defensa Alberto Espina “trataremos de que esto no vuelva a ocurrir y que no queden en la impunidad”. Para la derecha el virus del derecho a la circulación libre es más terrible que los muertos por la pandemia.
Te puede interesar: 73 mil efectivos militares y "boinas negras": el plan del gobierno junto a los municipios para fiscalizar al pueblo
Te puede interesar: 73 mil efectivos militares y "boinas negras": el plan del gobierno junto a los municipios para fiscalizar al pueblo
¿El gobierno cree que los militares van a combatir el covid-19? En realidad el gobierno busca dar una muestra de efectividad y despliegue. El discurso securitario que exige mayor represión del Estado por el aumento de la delincuencia y el discurso contra “los individuos irresponsables”, le permite aplicar este inédito plan de sitio contra la ciudad de Santiago. Y también este plan es el resultado de la derrota del gobierno de querer volver a la normalidad. Es una medida populista y represiva que sólo genera perjuicios y violencia.
Cuarentenas comunales aumentan recesión económica: despidos y suspensiones
Desde este viernes las FFAA comenzaron a controlar todos los centros de distribución de alimentos. En la Vega Central, comuna de Recoleta, una patrulla militar impidió el ingreso de personas exigiendo un permiso temporal mientras la página web para obtenerlo se encontraba caída. El uniformado llamó a obtener el permiso en comisarías. Las tres comisarías más cercanas tenían filas interminables para obtener un miserable papel, aumentando el tiempo de exposición de las personas.
La cuarentena generará dificultades para que las familias obtengan sus insumos básicos. Si salen sin un permiso serán detenidos y con el trabajo de la prensa tradicional serán catalogadas como “ciudadanos irresponsables” o “delincuentes” como formuló el alcalde Felipe Delpín cuando se hizo público este plan para militarizar la cuarentena. Además es una realidad que aumentará el desempleo producto de los despidos y suspensiones de todos los trabajos no esenciales que dejarán de funcionar mientras duren las cuarentenas. El gobierno y los alcaldes así sin más dejaron a cientos de miles sin empleo argumentando una farsa de responsabilidad civil. Esto aumentará la recesión técnica que tiene el país tras los efectos de la recesión mundial y las medidas contra la Pandemia.
Te puede interesar: En Chile mandan los empresarios: Expertos quieren legislar la repartición de utilidades mientras miles son arrojados al desempleo
Te puede interesar: En Chile mandan los empresarios: Expertos quieren legislar la repartición de utilidades mientras miles son arrojados al desempleo
En abril 1 millón de personas fueron afectadas por despidos y suspensiones en sus empresas ¿Con el aumento de las cuarentenas comunales esa cifra se disparará en mayo? El panorama pareciera confirmar que sí. La línea “social” del gobierno es un miserable bono y el resto es crédito a las empresas y el despido fácil totalmente legal.
Cuarentenas, militares y salud colapsada acelerara la pandemia
Todo lo contrario a lo que cree el gobierno las medidas de cuarentena sino van acompañadas de medidas de emergencia en salud y trabajo podrían aumentar los contagios en vez de detenerlos. Según un estudio la RM posee los mayores índices de hacinamiento en los hogares. Ésta situación se agudizará con el recorte de los salarios que se harán a los trabajadores. La burocracia asociada a los permisos generará mayores aglomeraciones y el cierre de locales hará que la circulación por la calle tarde o temprano comience a aumentar.
Rechacemos la farsa del gobierno. Luchemos por un plan de emergencia basado en los trabajadores de la salud y un aumento del presupuesto de la salud pública
Hay que rechazar toda restricción a las libertades públicas. En el mundo se demostró que las medidas represivas y el confinamiento masivo no detienen los contagios. Lo que detiene la pandemia es la ciencia y la salud pública. Junto con rechazar este ataque del gobierno a la libertad y el empleo de millones, hay que luchar por un plan de emergencia nacional que parta por un aumento del presupuesto de la salud pública para disponer de insumos médicos y construir nuevos hospitales, la aplicación de test masivos gratuitos para toda la población expuesta a la enfermedad. Para que hayan cuarentenas realmente racionales y que no afecten las libertades públicas, tiene que aplicarse una política de test masivos para identificar el virus, aislar y tratar a los contagiados.
La prohibición de los despidos, el cese de las labores no esenciales asegurando el mismo salario eliminando la figura de suspendido, un salario de emergencia para cualquier trabajador despedido o suspendido no inferior a $500.000 y un plan de alimentación escolar universal de calidad. Piñera saca a los militares mientras miles están sin empleo y los empresarios se reparten obscenamente enormes ganancias.
La crisis la deben pagar ellos. El mal manejo de la pandemia y la recesión mundial es culpa de los capitalistas. Todas estas medidas de emergencia podrían financiarse rápidamente con un impuesto especial a la riqueza de los 10 grupos económicos monopólicos de Chile. Es tiempo de que los sindicatos como la CUT rompan su tregua con el gobierno y luchen por estas medidas.

Gabriel Muñoz
Licenciado en Historia