El ex policía De Cándido será trasladado al penal de Villa Urquiza. Hasta mayo, un informe señala que 137 imputados y condenados por delitos de lesa humanidad realizaron presentaciones para acogerse a ese beneficio
Maximiliano Olivera @maxiolivera77
Jueves 18 de junio de 2020 08:45
Fotografía: diariodeljuiciotucuman.blogspot.com/
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán revocó la prisión domiciliaria con la que había sido beneficiado Luis Armando de Cándido, condenado por crímenes de lesa humanidad cometidos durante el Operativo Independencia y la última dictadura en Tucumán. El ex policía había violado sistemáticamente el régimen de la domiciliaria, de acuerdo a una presentación del fiscal federal Pablo Camuña.
De Cándido fue oficial de la Policía de Tucumán y formó parte del Servicio de Informaciones Confidenciales, grupo que tuvo a su cargo el funcionamiento del Centro Clandestino de Detención instalado en la Jefatura de Policía, en pleno centro de Tucumán. Fue condenado a prisión perpetua en el 2010 en la causa “Jefatura de Policía”, sentencia firme que se encontraba cumpliendo bajo arresto domiciliario. Además fue condenado a perpetua en los juicios conocidos como “Arsenal-Jefatura” de 2014 y “Operativo Independencia” en 2017.
Los jueces Gabriel Casas, Carlos Jiménez Montilla y Juan Carlos Reynaga (subrogante) ordenaron que Gendarmería traslade a De Cándido hacia el penal de Villa Urquiza, donde continuará cumpliendo la pena de prisión perpetua.
El sistema de vigilancia electrónico había alertado que De Cándido realizó salidas no permitidas durante el 25, 26 y 29 de mayo de este año. Desde la Fiscalía se remarcó que De Cándido cumplía prisión domiciliaria desde 2015, y que "gozaba de ese beneficio hasta junio de 2017 sin que existiera un sistema certero de control de su cumplimiento". Además, se sostuvo que el ex policía había "violado las condiciones de la prisión domiciliaria en 39 oportunidades desde que se le colocó el monitoreo electrónico".
La excusa del Covid19
La defensa de De Cándido intentó justificar las salidas por la “situación excepcional por la emergencia pandémica”, algo que fue desestimado por el TOF. Aunque en esta ocasión la pandemia del Covid19 fue utilizada para intentar encubrir la violación de la prisión domiciliaria, muchos condenados por crímenes de lesa humanidad usaron el mismo argumento para solicitar el arresto domiciliario.
De acuerdo a un informe la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, difundido en mayo, 137 imputados y condenados realizaron presentaciones para acogerse a ese beneficio. Debido a que varios fueron imputados o condenados por más de una causa, el número de peticiones asciende a 177.
127 peticiones fueron denegadas, mientras que en 34 casos se concedió el arresto domiciliario o la excarcelación. Además, 16 pedidos no habían sido resueltos aún hasta la fecha del informe.