A pocos días de oficializadas las listas, está claro el escenario hacia el 7 de abril. Los partidos que naturalizan el saqueo y la contaminación. La alternativa del Frente de Izquierda que propone dar vuelta todo.
Domingo 24 de febrero de 2019 15:12
Nos preguntamos, ¿son las luchas socioambientales compatibles con gobiernos o candidatos que imponen las ganancias de un puñado de empresarios y terratenientes sobre la vida de millones?
Frente al avance de multinacionales petroleras como Apache y Chevron, principalmente en la ciudad de Allen, el cultivo de la fruta en la zona se ve cada vez más desplazado con la creciente compra de tierras por parte de estas empresas que apuestan a seguir expandiendo la extracción de petróleo y gas no convencional.
Pero no hay que negar la resistencia de los pequeños productores, activistas ambientalistas y trabajadores de Allen que resisten al fracking. Mientras el gobernador Weretilneck pretende que avance la industria del petróleo, la contaminación del suelo y el agua ya son moneda corriente en el Alto Valle.
Los pequeños productores han tenido que vender hectáreas a las empresas porque están ahogados de deudas y el gobierno provincial no apuesta de ninguna manera al sostenimiento de los mismos. Sólo beneficia a los monopolios de la fruta como Expofrut.
Esta resistencia no sólo puede verse en Allen. En la región andina continúa la pelea por el libre acceso a ríos y lagos o las comunidades mapuches que defienden sus tierras de los negociados turísticos y de los grandes terratenientes como Lewis y Benetton y así pisamos el freno con la instalación de la planta nuclear Atucha III, que pretendía asentarse en la zona costera rionegrina.
También puede verse en el destacado repudio de toda la comunidad en el Área protegida Bajo Santa Rosa y Bajo Trapalcó, zona de gran valor paleontológico, donde existen actualmente mineras uraníferas. Todas estas luchas son peleas vitales, desde el PTS en el Frente de Izquierda decimos que estas experiencias de resistencia tienen que ser el punto de apoyo para “dar vuelta todo”
¿Qué opinan el FPV, Cambiemos y JSRN de la situación socioambiental?
El actual gobernador viene de dos gestiones, la primera, como parte de un frente provincial encabezado por el entonces kirchnerista Carlos Soria. Fueron quienes, junto con el FPV, en el 2011 derogaron la ley anticianuro como una de las primeras medidas de gobierno. Esta norma da lugar a la explotación de minerales a cielo abierto utilizando mercurio y cianuro.
Esta primera medida del recién asumido gobernador, Carlos Soria, hoy tiene una nefasta consecuencia ambiental en Calcatreu. Allí la empresa Patagonia Gold se hizo del yacimiento que tiene como vecinos a una comunidad mapuche y pueblos que se opusieron a la derogación de la ley conseguida en el 2005 con movilizaciones contra este tipo de extracción. El segundo mandato de Weretilneck se caracterizó por ser el mejor alumno del presidente Macri. De esta manera con el Pacto Fiscal y el Pacto Federal Minero, llevan adelante el ajuste, los tarifazos y benefician a las multinacionales y terratenientes con exenciones impositivas, menos controles y reducción de regalías.
El FPV no tiene nada que envidiarle a Weretilneck
En todo el país ha tenido y tiene una política clara, profundizar el modelo extractivista y el agro-negocio, así le ha dado lugar a las Barrick Gold, las Monsanto y las Chevron. De sobra son conocidas las consecuencias de este modelo extractivo que no sólo se lleva nuestros recursos, sino que causa verdaderas catástrofes ambientales. Presencia de millones de litros de solución cianurada en las aguas de Jachal, muertes por agrotóxicos, desplazamiento de comunidades indígenas en todo el país, derrames de hidrocarburos que afectan suelo, aire y agua.
En nuestra provincia, el FPV junto con Weretilneck derogó la ley anticianuro, Magdalena Odarda, quien ha llevado una importante agenda socioambiental en la provincia, opinó en aquel entonces: “El retroceso provincial más importante en material ambiental es la derogación de la ley 3891 que impedía en Río Negro la actividad minera metalífera a cielo abierto con uso de cianuro y/o mercurio. Nunca gobierno alguno impulsó en Río Negro una ley tan retrógrada”.
Ni hablar de la impunidad con que los grandes terratenientes como Lewis se mantuvieron durante toda la década k. El magnate amigo de Macri compró 12 mil hectáreas en el año 2005, vecinos y vecinas organizados por el libre acceso al Lago Escondido iniciaron distintos reclamos entre innovadoras protestas y demandas judiciales, pero nunca obtuvieron respuesta favorable.
En el 2013, el FPV impulsó junto al MPN en la ciudad vecina de Neuquén, el Pacto YPF-Chevron que impusieron con represión a las comunidades mapuche, trabajadores y jóvenes que lo rechazamos en las calles. Raul Godoy, diputado provincial por el Frente de izquierda, hizo una fuerte denuncia a este pacto secreto que saquea los recursos para que las multinacionales acrecienten sus ganancias, mientras el pueblo trabajador se ahoga en la contaminación del suelo y el agua.
La actual senadora Odarda de RIO, candidata a vice gobernadora que acompaña a Martín Soria en la fórmula, se ha caracterizado por las denuncias realizadas al gobernador actual en materia ambiental muy sentida por importantes franjas de trabajadores y trabajadoras.
Ella ha acompañado a las comunidades que repudian a la minería a cielo abierto, la derogación de la ley anticianuro mencionada más arriba, la impunidad de Lewis y ni hablar del fracking en Allen que hoy ahoga a los pequeños productores.
Pero en estas elecciones, paradójicamente, Odarda sostiene que la unidad con el peronismo contra Macri, es el camino para pelear contra esos negociados que el propio PJ-FPV impulsa.
El Frente de Izquierda tiene que estar
Por primera vez el Frente de Izquierda se presenta para las elecciones provinciales, con el gran desafío de plantar en Río Negro, la alternativa de los trabajadores, las mujeres y la juventud. En la provincia donde el cultivo de la fruta y el fracking “conviven” en las tierras más ricas de la Patagonia, la agenda socioambiental, es sin lugar a dudas uno de los debates principales que cruzan el escenario electoral.
Estamos convencidos y convencidas de que nunca va a primar la vida, si nuestros recursos naturales estén en manos de quienes sólo buscan engordar sus bolsillos.
La casta política que fomenta estos negociados y que hoy hace campaña con nuestros legítimos reclamos, no respira el mismo aire, no toma el mismo agua y no vive en las mismas condiciones que nosotros. Por eso proponemos DAR VUELTA TODO.
Frente al avance de las multinacionales saqueadoras, tenemos que poner fin al fracking y a la mega minería en todo el país, por eso planteamos, al igual que lo hicimos en Neuquén con la banca de Raul Godoy y en el congreso con Nicolás del Caño, la nacionalización de la industria hidrocarburífera bajo control de trabajadores y trabajadoras; profesionales de universidades públicas, y comunidades originarias, con perspectiva a una verdadera transición a energías limpias.
Vivimos en una provincia de grandes extensiones de tierra, donde solo un puñado de empresarios concentra la producción y comercialización de la fruta. Es necesaria la expropiación de la gran propiedad agropecuaria y nacionalizar la propiedad de los monopolios exportadores.
Proponemos un programa de subsidios, créditos especiales, y exenciones impositivas a los pequeños productores; pero también y con el objetivo de resolver y dar una salida de fondo evitando estos atropellos constantes, y para salvaguardar la producción a futuro de cientos de pequeños productores, se propone la estatización de la producción frutícola bajo gestión de sus trabajadores.
Tenemos que ser los trabajadores, las mujeres y la juventud quienes organicemos la economía, sacando de las parasitarias manos de un puñado de capitalistas nuestros recursos y el futuro de nuestras vidas, confiando en nuestras propias fuerzas porque somos los únicos interesados en defender la vida de nuestras comunidades y nuestros recursos.