La compañía británica Rolls-Royce, sinónimo por excelencia del lujo, la opulencia y el poder capitalista, dijo este martes que recortará 2.600 puestos de trabajo en los próximos 18 meses, en un esfuerzo por “reducir costos” tres semanas después de una advertencia de ganancias.

Diego Lotito @diegolotito
Miércoles 5 de noviembre de 2014
Foto: REUTERS/Jacky Naegelen
Al mismo tiempo que anunciaba su plan de recortes, la empresa ascendió a David Smith como director financiero de la división aeroespacial, en reemplazo de Mark Morris que decidió dejar la compañía tras 27 años.
Rolls-Royce es un grupo de compañías, todas derivadas de la compañía británica de automóviles y aeronáutica fundada por Henry Royce y Charles Stewart Rolls en 1906.
La Rolls Royce es conocida fundamentalmente por fabricar coches de súper lujo para millonarios (rama de la empresa actualmente propiedad de la alemana BMW). Sin embargo, es también el segundo mayor fabricante de turbinas y motores de avión del mundo, por lo cual mantiene jugosos contratos con el Estado británico.
Recientemente ha diversificado sus negocios, añadiendo incluso el desarrollo de propulsores marinos y sistemas energéticos con fines industriales, civiles y militares.
Cuenta con clientes en más de 120 países, incluyendo más de 380 compañías aéreas y financieras, 160 de fuerzas armadas, 4.000 clientes de marina, incluyendo 70 marinas de guerra, y 1.600 clientes de energía y energía nuclear.
El recorte de puestos será sobre todo en la división aeroespacial, o sea, de donde proviene su flamante nuevo presidente financiero. Pero no se descarta que los trabajadores de fabricación de motores civiles y militares, además de los de la rama de la marina, también sufran las consecuencias.
La compañía, que tiene sus dos grandes bases de operaciones en Bristol y Derby (suroeste y centro de Inglaterra, respectivamente), advirtió el pasado mes de octubre que las difíciles condiciones económicas obligaban a centrar sus esfuerzos en la reducción de costes, entre ellos los de la plantilla.
"Estamos tomando acciones gerenciales decididas y acelerando nuestro progreso en costos", dijo el presidente ejecutivo John Rishton a la agencia Reuters.
La operación “costará” a la empresa unos 120 millones de libras (192 millones de dólares) adicionales en los próximos dos años, antes de reducir el gasto en unos 80 millones de libras una vez que los cambios están completamente implementados.
Pero este ataque a una parte importante de la plantilla de trabajadores de la empresa pareciera ser sólo el inicio.
"Las medidas anunciadas hoy no serán las últimas, aunque contribuirán a que Rolls-Royce sea una compañía más fuerte y redituable", agregó Rishton.
Ian Waddell, dirigente nacional del sindicato Unite con presencia en la empresa, dijo que: “Rolls-Royce está en peligro de tomar decisiones en el corto plazo que lamentará más tarde. Este es un duro golpe a una mano de obra orgullosa y haremos todo lo posible para luchar por los puestos de trabajo”.
Este plan de despidos no sería el primer ataque de le empresa contra sus trabajadores. Ya en 2009, Rolls-Royce redujo en 5% su número de trabajadores (cerca de 2.000 empleados).
En Reino Unido, Rolls-Royce emplea a 20.000 trabajadores en sus cuatro instalaciones del interior de Inglaterra, 1.500 en cinco del noroeste y 2.400 en seis plantas en Escocia. El grupo cuenta con una plantilla de 55.000 personas en 45 países (17.000 de las cuales son ingenieros), el 60% de ellas en el Reino Unido.

Diego Lotito
Nació en la provincia del Neuquén, Argentina, en 1978. Es periodista y editor de la sección política en Izquierda Diario. Coautor de Cien años de historia obrera en Argentina (1870-1969). Actualmente reside en Madrid y milita en la Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras (CRT) del Estado Español.