El Ciclón cayó en Arroyito por la mínima diferencia ante el Canalla, con gol de Dupuy. Se profundiza la crisis en el club de Boedo.
Lunes 20 de septiembre de 2021 21:46
San Lorenzo no le encuentra la vuelta y sigue atravesando un mal momento. Foto: Juan José García para Clarín.
Lunes otra vez
Cuando casualidades hicieron que uno no arrancará a las 6:40, como cada lunes, te informaban más tarde del asueto del martes e ibas al psicólogo... creía que el lunes era perfecto, pero jugó el ciclón.
Los destellos de juego asociado, y un par de ataques muy buenos, ¿podrían darle una vida más a Montero? Un segundo tiempo con buen juego por momentos y varias ocasiones de gol perdidas, se vieron opacados por una defensa de las más flojas del fútbol profesional y la debacle final de un equipo que sigue sin invertir en GPS.
Cada centro de Central era una puñalada. Incluso en los momentos donde el ciclón inclinó la cancha en contra del conjunto de Santa Fe. Por esa vía llegó el gol canalla.
Es que después de buenos momentos teniendo como abanderado de todo lo que está bien a Siro Rosané, y ante la negativa insistente de convertir el gol, los jugadores azulgranas parece que casi instintivamente, preservándose, le entregaron el control de juego a un Rosario Central que era un cambalache: no se defendía bien, iba al ataque cómo podía.
Es casi increíble si uno ve ese momento donde despuntaron Rosané, Mercau... Y Cerutti. La más fácil que van a decir, que desde que salió lesionado este último se cayó el plan... Mentira, el ciclón cuando no puede meterla, después de 10 o 15 minutos, se retrasa automáticamente y el juego cae totalmente. Sólo lo salvó por momentos (y en otros partidos) la casualidad o Torrico. Hoy la casualidad era la protagonista hasta que dejaron a Dupuy solo, aunque rodeado de 3 o 4 jugadores de San Lorenzo, que estaban. Sólo eso en defensa, estar.
Una serie de rebotes y salvadas, pero Dupuy la terminó empujando, a los 85’. Después de eso, nada. Un equipo que está acostumbrado a empatar o ir abajo, pero la costumbre no lo hace reaccionar. No género mucho, y se podría haber ido con un gol más abajo. ¿Se puede sostener este intento de idea, a toda costa?
Basta
Simplemente eso, cualquier hincha verdadero del ciclón, debe opinar lo mismo. Apenas 10, 15 minutos de un poquito de juego, no existen para un grande. Es inadmisible a esta altura pensar que San Lorenzo este para pelear abajo. A esta altura de la noche, si Banfield no gana por 2 goles y lo pasa, el equipo comandado por Montero, Arreceygor, Tinelli y todos los de la comisión que van y vienen... O tienen licencias, está en el puesto 20. Si, 20 de 26: increíble, con un plantel de presupuesto internacional, que como decíamos, está faltó de GPS... Disanto, un delantero que solo está adentro, y rebota pelotazos improcedentes, ni hablar de Pitton, que cada vez que lo vemos no entendemos por qué juega, flojísimo defensor. La defensa pareciera improvisar cada 5 minutos.
Un club totalmente en llamas, al que los resultados futbolísticos no lo acompañan; ojo, del masculino... Invito a ver los partidos de las campeonas actuales de la liga femenina, punteras... Con juego, hambre de gloria y un presupuesto que es un chiste al lado del plantel de Primera. Quilombos entre dirigentes sobran, para dar una idea de quién está, con quién compartía fórmula y con quién se pelea en la actualidad.... Deberíamos hacer un mapa, casi como para entender quién es quién en Cien años de soledad. Arreceygor está contra Tinelli (con quién compartían fórmula) va un poco de la mano de Lammens (actual ministro de Turismo y Deportes, actualmente investigado por tener un patrimonio de 57 millones de pesos), pero quiere ser el próximo presidente electo, ya que en la actualidad cumple esa función porque Marcelo está con licencia. Este último quiere volver en 2022, arreglar el club y armar la ingeniería para juntar plata para el estadio en Boedo. Su imagen negativa, que haya dejado a la deriva al club hasta mayo... Mayo, del 2022 (es increíble, que un tipo electo por el 80% de los votantes, siga con su fracasado proyecto televisivo, dejando el club a la deriva).
Pero a buen entendedor, poco chamuyo: todos están en la búsqueda del tesoro, ese puesto político que los catapulte en sus riquezas. Los dirigentes persiguen el sueño macrista, utilizando a clubes para arrancar y así llegar al puesto que les deje jubilaciones de privilegio y múltiples negociados. Lo decía Ángel Cappa, palabras más, palabras menos... Como el fútbol era popular, del pueblo, la burguesía vio el negocio y se apropió de él para hacer sus negocios. A esto se dedican los dirigentes, empresarios que buscan más ganancias a costa de los clubes, símbolos de pertenencia de millones, amantes de los colores, del barrio, del juego... De ir a la cancha.
San Lorenzo no se salva de esto, ni por asomo... Solo los hinchas, pertenecientes a la clase obrera, pueden oponerse a esta destrucción de símbolos tan grandes de identidad, a la destrucción de un club tan grande, si ya hicimos miles de marchas, nos opusimos al intento de privatización, le provocamos millones de perdida a Carrefour... Logramos imponer la ley necesaria para construir el estadio en Av. La Plata, a costa de los dirigentes, siempre “POR LOS COLORES DE ESTE AMOR”.
*Socio refundador número 12780