Viernes por la mañana, en el predio de Arroyo Seco, el plantel de Rosario Central se entrenó con vistas al partido del próximo lunes, contra Lanús, en el Gigante de Arroyito.
Durante la práctica matutina, el entrenador, Miguel Ángel Russo dirigió un ensayo futbolístico en la cancha principal.
Mauro Yasprizza @mauroyas
Sábado 4 de octubre de 2014 10:44
Solo trabajaron con pelota Franco Cervi, Maximiliano González y Javier Correa. Mientras que, Federico Flores y Bruno Zabala continuaron con sus labores físicas de recuperación.
“Russo” repartió las pecheras, mientras lo jugadores terminaban de completar el trabajo físico que fue coordinando estrictamente y bajo la atenta mirada del “profe” Guillermo Cinquetti.
Mientras que la reina del boliche, “la pelota”, comenzó a tomar el protagonismo principal, se pudo dilucidar los equipos que armó el técnico.
De un lado de la cancha, y con pecheras color naranja se hallaban: Mauricio Caranta; Paulo Ferrari, Lucas Acevedo, Alejandro Donatti, Nahuel Quiroga; Antonio Medina, Fernando Barrientos, Nery Domínguez, Jonás Aguirre; Sebastián Abreu y Niell.
A priori se podría enunciar como el equipo que chocaría el lunes a las 18.10 y con el arbitraje de Pablo Lunati al conjunto “granate”.
En el otro flanco del campo de juego, se alistaron con vestimenta azul: Manuel García; Lucas Lazo, Tomás Berra, Yeimar Gómez Andrade, Rafael Delgado; Pablo Becker, Hernán Encina, Damián Musto, Walter Montoya; Walter Acuña y José Valencia.
Miguel Ángel, hizo las veces de arbitró por más de 50 minutos hasta que concluyó el cotejo. Mientras finalizaban con los ejercicios de elongación, el DT los reunió a todos los players en la mitad del campo, y les realizó una charla técnica de 10 minutos aproximadamente. En seguida todo el plantel se dirigió hacia los vestuarios para así darle el fin a la jornada del viernes.
A posteriori, Miguel Russo, tomo la posta en la rueda de prensa y como siempre no escatimó lengua a la hora de las preguntas. Lo primordial era saber si iba a realizar cambios para enfrentar a Lanús, y vociferó que alguna variante seguramente realizaría. Para nos, serian entre cuatro o cinco modificaciones.
Además de curiosear son el equipo, también se interpeló sobre las elecciones que el domingo se llevaran a cabo en “central”. Como buen zorro viejo del fútbol y hábil declarante, Miguel Ángel argumentó que solamente respondería a lo relacionado a la parte lúdica.
Otro de los que no le teme a los micrófonos es, Sebastian “loco” Abreu, que dialogó con el periodismo, y como siempre nos tiene acostumbrado a los que cubrimos al “canaya” , nos dejó unas cuantas frases más que interesantes.
Consultado sobre qué aspectos futbolísticos del equipo lo preocupaban después del partido ante Independiente indicó que "más que nada retomar el camino, por ahí hay que agarrar los diarios y no mostrárselos a los jóvenes, sobre todo, y saber que somos un equipo duro cuando todos somos sacrificados y dedicados y sabemos a lo que tenemos que jugar".
Yo escucho o leo los adjetivos de crack, fenómenos, pero tenemos que volver a lo nuestro, “nosotros somos pan y cebolla”. “No tenemos cracks, no tenemos fenómenos”. "Creo que el partido con San Lorenzo nos confunde. Muchos catalogaron que esa era la forma en que Central tenía que jugar.
Pero agarramos a un San Lorenzo en un momento especial y fue un partido que se dio en esa circunstancia para poder jugarlo así. Pero nuestras virtudes y nuestras realidades pasan por otro juego que creo ha quedado marcado no sólo en este torneo sino a lo largo de este tiempo", reflexionó el Loco.
Cuando se lo consultó sobre la política del club, tampoco esquivo el bulto, y dio su punto de vista. Pidió lo mejor para el club, y que los comicios se lleven a cabo de manera de manera tranquila. Y sobre la actual comisión directiva esgrimió palabras de elogio por la manera de manejar una institución tan grande como Rosario Central.
Como de costumbre el Uruguayo charló sin pelos en la lengua y dio sus sensaciones en lo futbolístico, como en lo políticos, tema que no es menor hoy en central, ya que esta a dos días de elegir al nuevo dueño del sillón de la calle Mitre.
