Será una materia optativa de la carrera de Medicina y buscará abordar el aborto como problema de salud pública. Grupos reaccionarios ligados a la Iglesia buscan boicotearla.
Viernes 19 de mayo de 2017
El Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional Rosario aprobó la incorporación a la carrera de Medicina de la materia optativa “El aborto como problema de salud”, impulsada por la Red de Profesionales de la Salud por el Derecho a Decidir.
Según explicaron a los medios las organizadoras, la materia buscará encarar el debate desde el punto de vista del derecho de las mujeres a la salud y a decidir sobre sus propios cuerpos, y como problemática de salud pública, abordando el marco jurídico, las herramientas legales, la disponibilidad de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) y los procedimientos y tecnologías médicas disponibles para la realización de ILE de forma segura.
El aborto clandestino en la provincia de Santa Fe
La ilegalidad del aborto es una de los principales problemas de salud para las mujeres en nuestro país. A pesar de tratarse de una práctica segura y de bajo riesgo cuando se realiza en ambientes adecuados, con personal y equipamiento adecuado, según datos nacionales cerca de 300 mujeres mueren anualmente por abortos clandestinos en Argentina.
En la provincia de Santa Fe existen escasos datos respecto al aborto clandestino. Esta ausencia no se debe sólo a la clandestinidad de la práctica, sino a la decisión política de poner “bajo la alfombra” la grave situación que viven miles de mujeres. Según un informe del Ministerio de Salud de la Provincia de 2011, por cada 10 partos se interna en hospitales públicos de la provincia una mujer cursando un aborto. Y esta cifra (que implica más de 1600 mujeres por año) es sólo la punta del iceberg; miles de mujeres se realizan abortos por fuera del sistema de salud y tantas otras se atienden en clínicas y sanatorios privados (que no forman parte de las estadísticas provinciales).
Una campaña reaccionaria con apoyo del diario La Nación
La respuesta de los grupos autodenominados “provida” no se hizo esperar. Los mismos que defendían el “derecho” de una psicóloga a manipular a una niña de 11 años víctima de abuso, ahora lanzan una campaña contra la incorporación de esta materia al cursado de la facultad de medicina. A esta campaña se sumó también el diario La Nación, que llega al absurdo de culpar al aborto de “diversos tipos de cáncer, infertilidad, estrés postraumático, depresión, suicidio, alcoholismo y adicciones”, un compendio de mentiras repetidas hasta el hartazgo. Y llega incluso a pedir que el Consejo Nacional Interuniversitario intervenga en la Facultad de Medicina.
La súbita preocupación el diario La Nación y de los movimientos “próvida” por la salud de las mujeres no llega a interesarlos por las mujeres que mueren o sufren secuelas en su salud por abortos clandestinos. En síntesis, su mayor preocupación es la vida del embrión y no las miles de mujeres que sufren en sus cuerpos las consecuencias de la clandestinidad del aborto.