Este jueves la Policía del gobernador peronista Omar Perotti amenazó con reprimir a los trabajadores portuarios que reclaman contra los despidos en la Terminal Portuaria Rosario. Esta pelea lleva más de un mes y en reiteradas ocasiones los trabajadores han decidido en asamblea continuarla hasta que sean reincorporados todos los trabajadores que fueron despedidos.
Tras la amenaza policial, los trabajadores hablaron con Telefé Rosario para explicar su conflicto y exigir al sindicato (Supa) que se ponga al frente del mismo. Entre otras cosas señalaron que
“Nos dicen que hay un acta acuerdo del Ministerio de Trabajo donde toman a todos los trabajadores menos a cinco compañeros. Nosotros decimos que queremos entrar todos. Todos adentro todos. El puerto sigue parado, la pérdida es de billones de pesos. Y es todo por cinco trabajadores. “Hago un llamamiento al gobernador, al intendente, a los concejales, a nuestro secretario general. Acá está la masa del gremio y él no está. Nosotros lo estamos esperando que venga para conducir esto. Nosotros somos referentes de la gente, nada más. El conductor es él. Por eso le pedimos y le pedimos al gobernador que destrabe esto. Si quieren lo pueden destrabar”. “Acá dice que somos cinco o diez personas. ¿Cuántas personas ves acá? Hay que empezar a desmentir cosas. Nosotros somos los primeros que queremos trabajar, los primeros. ¿Piensan que a nosotros nos gusta estar acá, abajo el puente? “Hay un acto discriminatorio con esos cinco compañeros [los despedidos, NdR]. Si vos no defendés a esos cinco compañeros, es el puntapié para que después venga la empresa y miente diciendo ‘mira me sobran 50’. Si no defendiste cinco, ¿cómo vas a defender a 50 compañeros? Estos muchachos tienen 20 o 23 años de laburo. Ahí hay dos o tres más viejos, que están a punto de jubilarse”. “Quiero dejar clara una cosa. Cuando viajamos a Buenos Aires a una de las audiencias al Ministerio de Trabajo dónde se dictó la conciliación obligatoria, se había decidido de ambas partes que íbamos a laburar. Se hizo una asamblea convocando a todos los muchachos que íbamos a laburar. Cuando nosotros nos presentamos acá, los compañeros que le tocó el turno de entrar a trabajar en la empresa seguían deshabilitado. La empresa violó la conciliación obligatoria. En este conflicto nosotros siempre pusimos el trabajo en primer lugar. Cuando nosotros dijimos vamos a trabajar, nos encontramos con la puerta cerrada para todos los compañeros que no pudieron ingresar”.