Es por el hackeo de 20.000 mails del Partido Demócrata. Rusia dice que Las acusaciones de Hillary Clinton son para camuflar sus “travesuras” electorales. El apoyo velado de Putin a Trump.
Lunes 1ro de agosto de 2016 12:44
Foto: EFE - ALEJANDRO GARCÍA
Te puede interesar: Hillary Clinton es la candidata
El escándalo se inició con la filtración de 20.000 mails del partido demócrata que se dieron a conocer por medio de Wikileaks. En los mails se mostraba como la dirección nacional de dicho partido había influido en las primarias estadounidense para favorecer a Hillary Clinton contra su adversario, Bernie Sanders. Fue entonces cuando la candidata demócrata acusó al gobierno de Rusia de estar atrás de este “ciberataque” y agregó que “Rusia hizo preparativos para que se publicaran muchos de esos correos", acusando al candidato republicano estadounidense, Donald Trump, de mostrar "una alarmante disposición a respaldar a Putin".
La respuesta de Rusia
Desde el Kremlin respondieron diciendo que las acusaciones de los Estados Unidos contra Moscú eran parte de un encubrimiento para ocultar el hecho de que la campaña electoral estadounidense había sido manipulada por fuerzas internas.
Dmitry Peskov, vocero del Kremlin, dijo que las declaraciones de Clinton son “del tipo de la retórica pre electoral y no contienen nada de tangible”. A su vez remató diciendo que “Órganos oficiales rusos (...) no realizan ciber-terrorismo" y añadió que el Kremlin quiere ver una normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia”.
El gobierno ruso ha negado en reiteradas oportunidades haber estado involucrado en el incidente de infiltración informática y afirma no favorecer a ninguno de los candidatos en la elección presidencial estadounidense del 8 de noviembre, de todas formas, pese a su postura oficial, la televisión respaldada por el Kremlin ha inclinado su cobertura a favor de Trump, a quien Putin ha calificado como "muy talentoso".
Desde la cancillería agregaron que las afirmaciones de Clinton son "insultantes e indignas del nivel de una campaña electoral presidencial", y aseguró que su único objetivo es "influir en el electorado norteamericano con acusaciones sin confirmar".
"Considero que esto es simplemente escandaloso y lo que demuestra, cuando uno recurre a tales argumentos, es debilidad", dijo Andréi Krutskij, emisario ruso para cooperación en el ámbito de la seguridad informática.
De esta manera Rusia se mete en la campaña electoral estadounidense prácticamente invitado por sus propios candidatos. Durante la semana pasada Trump hizo un llamado para que los hackers rusos den a conocer todos los mails de Hillary (en medio de la convención demócrata). Hillary por su parte había acusado a Moscú de estar detrás de la filtración de correos y el FBI abrió una investigación, aunque sin ninguna prueba solida contra Rusia. De momento Putin parece no haber desaprovechado la “invitación” de ambos candidatos y puso a sus funcionarios a opinar abiertamente sobre la carrera presidencial en Estados Unidos.