Los trabajadores y trabajadoras de la educación y de la salud en Río Negro profundizan su plan de lucha por mejoras salariales y a la espera de una nueva oferta paritaria que recomponga los salarios y dé respuestas a la grave situación que se vive en los establecimientos educativos y hospitales de la provincia.
Miércoles 12 de abril de 2023 13:30
A pocos días de realizarse las elecciones provinciales donde se elegirán los representantes provinciales para el Ejecutivo y la legislatura provincial como así también en la mayoría de los municipios de la provincia, la situación con los gremios UnTER y ASSPUR se agrava por la falta de respuestas de la gobernadora a los reclamos por salarios de los trabajadores estatales, que se encuentran bajo la línea de la pobreza.
Ambos conflictos se recrudecen esta semana como consecuencia de la intransigencia del gobierno a realizar una oferta superadora a los docentes y la falta de dialogo directamente con el sector salud al que le desconoce sus legítimos representantes agrupados en la Asociación Sindical de la Salud Pública. Estos últimos comenzaron hoy 48 horas de paro con movilizaciones mientras que la Unión de Trabajadores de la Educación realizará 48 horas de paro desde mañana jueves y la semana entrante 72 horas desde el día martes.
Paro de salud
Desde ASSPUR aseguraron que la situación de la salud pública en la provincia se encuentra “desbastada, con estructuras edilicias en pésimas condiciones, sin ambulancias, equipos ni insumos suficientes, falta de profesionales y trabajadores bajo la línea de la pobreza”, en un comunicado dieron a conocer que “luego de más de dos años de reclamos sostenido en las calles, Hospitales y despachos del Ministerio de Salud, gobierno y legislatura seguimos reclamando con urgencia una respuesta a salarios con ingresos que igualen a la canasta familiar e indexado a la inflación, porque no queremos nunca más a un trabajador por debajo de la línea de pobreza”.
El gremio de la salud sigue con su demanda de “apertura de una mesa salarial con plena representatividad de ASSPUR y un convenio colectivo de trabajo con el restablecimiento de la carrera sanitaria profesional y no profesional con el establecimiento de una escala salrial ordinaria y extraordinaria”, asimismo exigen “hospitales en condiciones dignas, abastecidos de recursos y personal en todos los sectores, l reducción de la edad jubilatoria y el 82 % móvil, la desprecarización laboral con el 100 % del salario registrado y en blanco, el fin de las violencias y acosos laborales, el cese de las persecuciones y la libertad sindical”.
Por estas demandas es que durante el miércoles y jueves de esta semana se realiza el paro de 48 horas y se mantiene en estado de asamblea y movilización permanente con actividades en los diferentes hospitales y centros de atención primaria de la provincia para lograr que el Estado provincial escuche las demandas el sector.
Paro docente
Por su parte las y los docentes de la provincia entran en una nueva semana de plan de lucha que comenzó en marzo a raíz de la miserable oferta salarial que propuso el gobierno de Arabela Carrera y que ha sido rechazada por la mayoría de las y los trabajadores en sus asambleas imponiéndole a la burocracia Azul Arancibia que conduce el gremio y ha tenido una posición negociadora con los funcionarios provinciales tratando de entregar la lucha impulsando la aceptación de la miserable oferta del gobierno, mientras que la base docente ha dejado manifiesta voluntad de no dar el brazo a torcer y arrebatarle al Estado una mejora salarial que les permita superar la línea de la pobreza y aspirar a vencer de una vez por todas los niveles inflacionarios que golpean al conjunto de los y las trabajadoras.
El plan de lucha que han conquistado en base a lo que e ha discutido en cada asamblea de la provincia definió que esta semana se realice un nuevo paro de actividades los días jueves y viernes de 48 horas y la semana entrante realizar 72 horas de medidas los días martes, miércoles y jueves. Por su parte el paro estará acompañado de acciones en las diferentes localidades para dejar en evidencia el desamparo en el que se encuentran realizando sus tareas donde el gobierno no atiende las soluciones que demandan en el plano edilicio pero así también en cuanto al refrigerio de los chicos y chicas que asisten a los establecimientos educativos donde, como se denunció hoy en Cipolletti, ni siquiera les acercaron una rodaja de pan a las escuelas para el desayuno de los estudiantes.
Las medidas de esta semana estarán acompañadas de movilizaciones locales buscando evidenciar y visibilizar el reclamo y el estado de las escuelas, el vaciamiento que sufre la Obra Social IPROSS, la exigencia de la derogación de la moratoria jubilatoria para el sector y por salarios dignos.
Desde la Agrupación docente 9 de Abril Río Negro sostuvieron que “mientras la gobernadora Carrera circula por todos los medios demonizando a las y los docentes y responsabilizándolos por la falta de clases en medio de la campaña electoral, las ollas populares y las jornadas en decenas de escuelas demuestran que comunidad educativa se está organizando en defensa de Educación pública. Las y los docentes que desde abajo se suman día a día a las asambleas y acciones, no son organizaciones haciendo campaña. Son familias, son maestras, son trabajadores de la educación que se organizan y luchan mostrando cual es el camino”, y remarcaron su exigencia a la CTERA para que llame a un paro nacional para acompañar los reclamos de la docencia que a lo largo del país continúa con las mismas demandas que las y los docentes rionegrinos.
El conflicto entre estatales y gobierno se ha ido profundizando como respuesta de un Estado que hace oídos sordos a los legítimos reclamos para superar los salarios de pobreza en una provincia donde los costos de vida se han disparado como consecuencia de los altos índices inflacionarios y que han golpeado profundamente al bolsillo de trabajadores que no cuentan con un ingreso acorde a las tareas que realizan y que se enfrentan a un gobierno que niega soluciones presionando junto a las burocracias sindicales para someter a los trabajadores a la resignación de un ajuste que se impone desde el FMI y que cuenta con el aval del gobierno nacional y provincial que buscan imponer la miseria y el hambre, para garantizar las ganancias de las patronales y los organismos internacionales.