En sintonía con los hostigamientos, recortes y ajustes que se vienen llevando a cabo en el sistema educativo a nivel nacional y, sobre todo, contra las y los docentes y estudiantes, el Gobierno de San Luis no le pierde el ritmo.
Miércoles 25 de noviembre de 2020 15:46
La comunidad educativa de la Provincia de San Luis hace décadas que viene sufriendo las políticas de ajuste por parte de los Gobiernos de los hermanos Rodríguez Saá (y, en su momento, de Claudio Poggi), en cuanto al desmantelamiento y la desfinanciación de la educación pública. En el caso particular del Instituto de Formación Docente Continua de la Ciudad de Villa Mercedes (IFDC-VM), la situación de precarización de las y los docentes viene tomando niveles cada vez más importantes.
En este sentido, el edificio en el que se dictan las clases de los diversos profesorados se encuentra en condiciones bastante desfavorables de infraestructura e iluminación, que ponen en alerta al conjunto de la comunidad educativa que asiste a cursar y trabajar. Además, otra de las problemáticas vigentes, particularmente en el Profesorado de Teatro y Música, es que la cobertura de las materias específicas suelen ser cubiertas “de onda” por personal no docente, a pedido de las autoridades administrativas.
De acuerdo a los reclamos que se pudieron apreciar en la Asamblea que se llevó a cabo el pasado martes, uno de los docentes del instituto, Pablo Soto (quien padece de una Disección Aórtica con Aneurisma Toraco-Abdominal) se encuentra trabajando como responsable del Área de Teatro, bajo la modalidad de contrato, y percibe el sueldo más bajo entre la docencia. Asimismo, hace unos meses, sufrió un ACV y, en el momento en que decidió volver a trabajar, las autoridades administrativas del IFDC-VM, sin ánimos de mejorar su situación laboral o ascenderlo de categoría, le sugirieron que se “jubilara”. Otra de las problemáticas latentes en la institución es que los docentes no cuentan con materiales y medios necesarios para desarrollar sus clases, pues en el profesorado de música, parte de los instrumentos que cuentan para ensayar las y los estudiantes han sido comprados con el sueldo de las profesoras y los profesores del área.
Por si fuera poco, tanto la docencia del IFDC de Villa Mercedes como la del IFDC de la Ciudad de San Luis, se encuentran sometidos a un sistema arbitrario de “reválida” (único en el país), en el que las y los docentes deben convalidar sus puestos de trabajo cada dos años, lo que provoca una situación de constante inestabilidad laboral. De esta manera, la “reválida” - a rasgos generales - termina siendo un mecanismo de disciplinamiento y persecución a manos del Ministerio de Educación de la Provincia de San Luis, conducido por Andrés Dermechkoff, con el aval del Gobernador Alberto Rodríguez Saá.
Actualmente, dentro del IFDC-VM se encuentran tres docentes con sus respectivas reválidas “suspendidas”, es decir, están a la espera de que les renueven sus puestos de trabajo. La justificación que ha manifestado el Ministerio de Educación es que se trata de un “problema legal y burocrático” que está en trámite, aunque no haya ningún papel o documento firmado por parte de los funcionarios que certifiquen sus dichos.
Este conflicto tiene cierta semejanza con una situación similar que se desarrolló en el año 2014 dentro del IFDC–San Luis, en el que a dos docentes no les revalidaron sus cargos por razones políticas y, desde el propio Ministerio de Educación local, llevaron adelante diversos mecanismos para desviar la acción política que se estaba llevando adelante por las y los docentes y estudiantes, con la toma del instituto, asambleas masivas y movilizaciones.
De esta manera, si nos atenemos a analizar el panorama actual, las condiciones de las trabajadoras y los trabajadores de la educación han seguido deteriorándose, más aun, teniendo en cuenta que, en el transcurso de la pandemia, miles de docentes de la provincia todavía padecen el asedio del desempleo, sueldos adeudados, condiciones precarias de trabajo que, junto a la ausencia de llamados a concursos, ponen en evidencia que la educación no es una prioridad en la agenda del Gobierno provincial y, mucho menos, para el Ministro Dermechkoff.
Es por ello que, el pasado martes, docentes, estudiantes y diversas organizaciones sindicales, estudiantiles, sociales y políticas realizaron una movilización en el centro de la Ciudad de Villa Mercedes, denunciando el deterioro de los institutos de formación docente de la provincia, las condiciones de precariedad de la docencia, así como la situación de desempleo que padecen hace años cientos de profesoras y profesores locales.
“Estabilidad laboral, ¡YA!”; “NO al desmantelamiento y vaciamiento en Educación”; “Ningún docente sin aula, ningún estudiante sin docente”; “¡Basta de persecución política!”; “Apertura de llamados, ¡YA!”; entre otras; fueron las principales reivindicaciones y demandas que se hicieron escuchar durante la jornada de lucha.
La desesperación y bronca que atormenta la precarización, el desempleo y la inestabilidad laboral de cientos de docentes y estudiantes en toda la provincia, debemos transformarlas en una fuerza organizada y articulada con las luchas que está emprendiendo la clase trabajadora de conjunto, recuperando los sindicatos de las manos de la burocracia sindical, para que - de una vez por todas - la crisis económica, social y sanitaria actual no recaiga en quienes día a día salen a laburar, sino que sea pagada por el empresariado, las patronales y la casta política que gobierna.
A continuación reproducimos un fragmento del documento confeccionado por los Estudiantes del IFDC-VM hacia las autoridades locales, con el objetivo de visibilizar el reclamo y sumar la solidaridad de y con otros sectores en lucha:
“No queremos ni podemos seguir permitiendo que por la ausencia de políticas educativas claras, siga rigiendo la voluntad de nuestros gobernantes sobre el destino de las instituciones en que estudiamos y el de las y los docentes que participan en nuestra formación profesional. Hace más de veinte años que esperamos la redacción de una normativa propia y clara que garantice no solo la estabilidad laboral del cuerpo docente, sino también la calidad y seguridad educativa que, como estudiantes del instituto y futuros docentes, nos merecemos”.