Escandaloso fraude en la rendición de cuentas 2019 del intendente Passaglia. El periodista Villaescusa denuncia que faltan millones de las arcas municipales. Fondos destinados al sector educativo fueron para comprar el predio de la Expoagro y el Autódromo.
Domingo 31 de mayo de 2020 13:52
Imagen: Marcos Caon
En la mañana del jueves se votó en el Concejo Deliberante de San Nicolás la rendición de cuentas del municipio correspondiente al período 2019, que la Secretaría de Hacienda elabora para dar muestra de los fondos destinados a las distintas áreas, entre ellas salud, educación, obras públicas, etc. La rendición de cuentas fue aprobada sin mayores inconvenientes por el oficialismo, que responde al intendente Manuel Passaglia, y que cuenta con mayoría automática para aprobar cuanto proyecto sea enviado y/o avalado por el intendente. Sin embargo, al instante trascendió que las cuentas no cerraban…
¿Los motivos? Especialmente dos: uno es la falta de alrededor de 311 millones de pesos del total de la partida presupuestaria; y el otro es el desvío de fondos destinados a las escuelas y programas sociales para financiar la compra del terreno en donde están emplazados el Predio Ferial, donde anualmente tiene sede la Expoagro, y el Autódromo, que habitualmente recibe a distintas categorías del automovilismo nacional. En este último caso, la cifra del desvío de fondos asciende a casi 29 millones de pesos. Un escándalo por donde se lo vea.
Según la investigación realizada por Francisco Villaescusa, periodista de Radio NOBA, en el marco de la operación de compra del terreno que está ubicado a pocos metros del cruce entre las rutas 9 y 188, se estableció un contrato que fijaba el pago de una suma de 1.970.000 dólares, firmado en septiembre de 2016, con vencimiento en septiembre del año pasado, y prorrogado hasta el 30 de mayo de este año. En la rendición de cuentas figura que se utilizaron $26.515.746 del Fondo de Financiamiento Educativo, y $2.400.000 del Fondo de Fortalecimiento de Programas Sociales. Es decir, casi 29 millones de pesos destinados a la operación de compra del terreno del Predio Ferial/Autódromo. Tal información consta en el documento de la rendición de cuentas, en el que además se indica que el desvío de dinero fue realizado a través de dos cuentas bancarias: la 51823/9, correspondiente al depósito del Fondo de Financiamiento Educativo; y la 50107/7, destinada para el Fondo de Fortalecimiento de Programas Sociales.
Esta malversación de fondos es sólo una parte de un agujero aún mayor. Y es que los llamados Fondos Afectados (el dinero proveniente de la recaudación municipal, de Provincia o de Nación, destinado para solventar áreas específicas) vieron notablemente disminuidos sus saldos en la rendición de cuentas. El saldo total en torno a lo que dan cuenta los libros contables debería ser de $424.490.462; sin embargo el saldo declarado es de $112.656.617, es decir que hay una faltante de más de 311 millones de pesos cuyo destino no fue especificado. El área de educación se lleva la peor parte: en el Fondo de Financiamiento Educativo faltan más de 160 millones, pues de los $169.299.059 que deberían figurar en el saldo actual, solamente fueron declarados $8.480.740.
Cabe destacar que la construcción del Predio Ferial/Autódromo fue promocionada como uno de los grandes logros de gestión del clan familiar Passaglia, junto con otras megaobras, como más recientemente el Estadio Único, igualmente sospechado de manejos irregulares en el presupuesto para su construcción. Al mando de la municipalidad de San Nicolás desde 2011, Passaglia padre e hijo no han tenido problemas para presentarse a elecciones por el Frente para la Victoria ni para dar el salto a Cambiemos en 2017. A su vez, Ismael Passaglia fue ministro de Salud bonaerense durante la gobernación de Felipe Solá, y titular del Instituto de la Vivienda durante la gobernación de María Eugenia Vidal. La única diferencia es el sello partidario de ocasión: desde hace más de 8 años llevan una gestión de patrones de estancia, con un prontuario largo de hechos de corrupción, que incluyen negociados a beneficio de la familia y de empresarios amigos, irregularidades en el manejo de los fondos públicos del municipio, lavado de dinero, recortes y desvíos de fondos en varias áreas como salud, educación y obras públicas para solventar las mencionadas megaobras, y hasta el crecimiento desproporcionado del patrimonio familiar.
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Como contrapartida de la imagen de una ciudad próspera y feliz “de cara al río” que exhibe la gran cantidad de carteles publicitarios desplegados a lo largo de la ciudad, aparece la cada vez más acentuada precarización de los barrios periféricos, agravada con el actual contexto de pandemia y aislamiento social obligatorio a raíz del COVID-19, y también de suspensiones y despidos, situación de la que la ciudad y alrededores no están exentos. Esto se expresa en la falta de servicios básicos en muchos de esos barrios, la proliferación de epidemias como el dengue, el cierre de varios de los dispensarios barriales, el desmantelamiento de centros comunitarios, como el C.I.C. de Barrio Garetto, la nula asistencia a los comedores escolares, el anegamiento de las calles en días de lluvias y la dificultad para llegar hasta el centro y otros puntos de la ciudad a causa del deficitario servicio de transporte público, controlado por el monopolio de Vercelli, una de las empresas beneficiadas por la gestión Passaglia y por la subvención a las empresas concesionarias.
En un contexto de pandemia y de emergencia social, con una crisis que empieza a mostrar sus consecuencias castigando a los sectores obreros y populares, es inadmisible la falta injustificada de la plata destinada a la educación, la salud y los programas sociales, desviada para solventar negocios inmobiliarios privados. Frente al fraude y el saqueo de un gobierno municipal cuasi feudal, es necesario poner en pie la unidad y la organización de obreros, estudiantes, jubilados y desocupados en la lucha y exigencia para que la plata vaya hacia las escuelas, los centros de salud, los comedores, los programas sociales, y no para los negocios de los Passaglia y sus amigos empresariales.