La ministra Darias ha señalado que serán las comunidades autónomas las encargadas de organizar la campaña de vacunación.
Martes 7 de diciembre de 2021
Un niño recibe la dosis de Pfizer en EEUU. REUTERS/Jon Cherry/File Photo
El Ministerio de Sanidad, tras la evaluación de la Ponencia de Vacunas y la aprobación de la Comisión de Salud Pública, ha aprobado la vacunación contra el coronavirus para los menores de 5 a 11 años.
La vacuna de Pfizer, que consistirá en un tercio de la dosis aprobada en adultos, será administrada a tres millones de menores. Habrá un margen de tres semanas entre la primera y segunda dosis. La vacuna habría demostrado en los estudios realizados que prevendría el 90% de los síntomas.
La decisión de Sanidad se produce después de que el 25 de noviembre la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) respaldara la vacuna. A falta de conocer más detalles, serán tres millones de niños y niñas los que recibirían la vacuna de Pfizer, que consistirá en un tercio de la dosis aprobada en adultos. Se daría un margen de tres semanas entre el primer y el segundo pinchazo.
La campaña de vacunación comenzará el 15 de diciembre, puesto que el Estado español recibirá el próximo 13 de diciembre 1,3 millones de vacunas infantiles, según anunció la ministra de Sanidad, Carolina Darias, al término del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el pasado día 2 de diciembre.
Darias, que participa este martes en el Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (EPSCO) en Bruselas, ha apuntado que serán las comunidades las encargadas de proceder al plan de vacunación que cada cual estime. Entre las opciones se baraja que los pinchazos se realicen en los centros escolares, aunque aún falta por concretar cada procedimiento.
En el Estado español son los menores de 11 años son los que presentan una mayor incidencia acumulada a 14 días por 100.000 habitantes, con 203,57 según datos del Ministerio de Sanidad publicados a finales de noviembre.
Según una nota de prensa difundida por el ministerio de Sanidad, la Comisión de Salud Pública ha aprobado esta vacunación "para disminuir la carga de enfermedad de este colectivo y la transmisión en el entorno familiar". Además, ponen en relevancia "la importancia de proteger a los menores ante posibles afecciones a futuro y frente al síndrome de covid persistente".
En cuanto a la conveniencia o no de la vacunación entre la población infantil, distintos expertos hablan del balance riesgo-beneficio como la clave en la que debe pivotar el debate. “La vacuna se está mostrando como segura y no hay motivo para pensar que los efectos en los niños de 13, que ya se están vacunando, van a ser diferentes en los de 12 años”, sostiene el médico de familia, Javier Padilla. Consultado por El Salto, el también diputado por Más Madrid en la asamblea madrileña, considera que el balance riesgo-beneficio es “favorable sobre todo en términos sociales”.
El epidemiólogo Pedro Gullón, también consultado por El Salto, comparte esta visión aunque afirma tener “alguna duda” en países donde el porcentaje de vacunación es tan alto como en España. Para este epidemiólogo hay dos niveles: el nivel individual y el nivel colectivo. “La diferencia en la vacunación infantil con la de los adultos es que los beneficios individuales son menores porque la enfermedad tiene menor probabilidad de ser peligrosa en la infancia. Total que aunque los riesgos sean los mismos, los beneficios son menores”, explica Gullón. Pero, desde el punto de vista de las dinámicas poblacionales “pueden ser contagiados y contagiar y esto hace que la balanza se decante por vacunar a los niños”, explica.