En esta mañanera Andrés Manuel López Obrador anunció que ayer entregó el primer informe a los padres y madres de los 43 normalistas de Ayotzinapa que se comprometió a redactar personalmente y hacérselos llegar, sin embargo, dijo que de momento no se hará público su contenido.
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Martes 9 de julio de 2024
Dicho informe debió haber sido entregado la semana pasada, cuando los padres y madres fueron citados en Palacio Nacional para recibir una supuesta actualización referente a los avances de la investigación. No obstante, a la salida de este evento al medio día del miércoles 3 de julio, el abogado Vidulfo Rosales declaró que ni recibieron el informe que debían haber recibido, ni se les informó de algún avance sustancial en las investigaciones.
Declaración de los padres en voz del abogado Vidulfo Rosales a la salida del encuentro con AMLO del 3 de julio
Hay que recordar que, apoyados en la información y la asesoría que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, padres de los 43 descubrieron la ausencia de 800 folios de información clave en manos del ejército mexicano para avanzar en el esclarecimiento de los hechos, dar con el paradero de los normalistas y fincar responsabilidades.
De esos folios, solo les han sido entregados 15, el resto es constantemente negado por la Secretaría de la Defensa Nacional, a pesar de las solicitudes que los familiares de las víctimas continúan realizando y de que hay pruebas que permiten establecer la existencia del resto de información.
López Obrador dijo que, además de que no se va a hacer público el contenido de este informe, entregará otros dos, también supuestamente redactados por él mismo. “Quiero que conozcan lo que les estoy informando, ya después vemos”, fueron las palabras del presidente.
Al final de la última reunión algunos padres expresaron su malestar frente a las declaraciones de AMLO, quien, según refirieron, dedicó mucho tiempo a descalificar a comunicadores, abogados y organizaciones de derechos humanos que los han estado apoyando, asegurando que solo quieren denostar al Ejército Nacional, mostrando la férrea persistencia presidencial por defender a las fuerzas armadas a como dé lugar, aún con las pruebas que el GIEI encontró y que apuntan a la responsabilidad de altos mandos en los hechos de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
