El domingo cinco de mayo se realizó el torneo mixto de fútbol "Silvia Roggetti", organizado por ATEN.
Lunes 6 de mayo de 2019
En otro contexto esto sería una noticia del orden de las misceláneas, cercana al divertimento dominical, propio de trabajadoras y trabajadores, alrededor del fútbol.
Pero la realidad, en tiempos de crisis, evidencia las grietas escondidas bajo la alfombra nacional. Una de ellas es la manifiesta traición de dirigentes sindicales ante los violentos ataques patronales a quienes dieron su vida trabajando, a quienes pueden decir que tienen trabajo y a quienes se preparan para el mundo laboral. Millones bajo la línea de pobreza mientras "los gordos" garantizan la paz social al gobierno del FMI, la banca usurera y los empresarios, por un pedazo de la torta que no van a compartir con los trabajadores, que somos quienes sostenemos cada sindicato.
Neuquén no escapa a esta realidad. Aquí también la grieta entre dirigentes sindicales y los padecimientos de la base se palpan y se profundizan día a día.
Trabajar en la escuela donde Silvia Roggetti dejó su impronta en la comunidad educativa y en la defensa de la educación pública es un gran compromiso.
Y nos hubiera gustado jugar el torneo... pero en el patio principal de la escuela, donde juegan nuestros estudiantes de segundo y tercer ciclo, con los peligrosos bordes de cemento acechando en cada recreo, o en el "patio de los chiquitos", esquivando piedras y ramas. Y también nos hubiera gustado compartir el premio con el barrio que acompañó a maestras, maestros, auxiliares y a la familia de Silvia, exigiendo justicia. Todos juntos.
Pero no fue así. La dirigencia kirchnerista de aten prefirió lavarse la cara con un torneo lejos de la realidad. Lavarse la cara en dos planos.
El primero con el nombre del torneo, cuando se multiplican las situaciones de deterioro de los edificios públicos, principalmente de las escuelas, y que incluye accidentes sufridos por los trabajadores.
El segundo con el carácter del torneo, queriendo reivindicar la igualdad de género que el Estado no cumple y que la misma dirigencia calla de acuerdo a su conveniencia.
Las cada vez más claras evidencias de destrucción de la educación pública, que incluye reformas (anti)educativas, (anti)laborales, (anti)previsionales, ya objetadas por la mayoría de trabajadores, y ahora también por los estudiantes; accidentes laborales; deterioro de edificios, materiales y elementos educativos; sean minimizadas con el silencio, la apatía e insensibilidad del TEP conduciendo el gremio. Desconocen que las bases, que somos quienes vivimos la situación en las que estamos dando clases, podamos expresarnos y decidir en las asambleas que hacer ante tantos ataques recibidos por parte del gobierno, solo porque se han convertido en un apéndice de las medidas del gobierno contra los trabajadores.
Usar el nombre de Silvia no es el único ultraje de esta conducción. También abandona a las compañeras nuevas que acceden al trabajo y reciben un salario por debajo de la línea de pobreza y abandona a los estudiantes que no reciben un refrigerio nutritivo necesario.
Exigimos asambleas y reuniones de delegados inmediatamente porque no podemos permitir que la democracia que aten cultivo por años sea rifada a un gobierno que desprecia la educación pública y abre las puertas a la educación privada.
¡Bienvenida la diversión compartida!... pero primero hay que conquistar las mejores condiciones de trabajo para toda la comunidad educativa y eso solo lo conseguimos luchando organizados para frenar, primero, los continuos ataques con la que quieren descargar sobre nuestras espaldas, la crisis, que la generaron los mismos de siempre.
