A propósito del escándalo por corrupción en la FIFA y los movimientos en la cúpula de la AFA, compartimos la opinión de Pablo Maltz, periodista deportivo, comunicador social y docente.
Pablo Maltz @pablomaltz
Viernes 5 de junio de 2015
Foto: La Máquina Radio
Una nueva oportunidad aparece en el fútbol profesional. Es el momento de aquellos dirigentes, socios, periodistas y futboleros que siempre denunciaron las maniobras de la AFA y quieren cambiar las cosas. Dentro de esas críticas se escuchan intenciones genuinas de formar una asociación más transparente y por otro lado, a los oportunistas de siempre, que ven una chance para meterse en el negocio.
La muerte de Grondona y la salida anticipada de Blatter están logrando que la situación que parecía eterna, ya no lo sea. Una pequeña esperanza se asoma en el horizonte de los amantes del fútbol.
El Martes de esta semana Blatter – en inédita conferencia de prensa a 4 días de su re-re-re-reelección – afirmó: “Si bien tengo el mandato de los miembros de la FIFA, no siento que tenga el mandato de todo el mundo del fútbol, los hinchas, los jugadores, los clubes, la gente que vive, respira y ama el fútbol como todos lo hacemos en la FIFA…” y avisó que convocará, en un lapso aún incierto, un Congreso Extraordinario para elegir sucesor.
Si nos guiamos por los nombres que se barajan, es difícil que cambie la burocracia y oscuridad de la FIFA, aunque el lavado de (dinero) cara será importante. No es un dato menor el origen de la denuncia, porque si bien la justicia de EEUU tiene como objetivo recaudar dinero que se evadió, alrededor del fútbol se montó un negocio que no tuvo a los norteamericano como principal país beneficiado.
Mientras el mundo sigue hablando de Blatter, desde Argentina se escuchan voces que proponen realizar cambios importantes para democratizar la AFA. La apertura de las decisiones a todos los dirigentes y los mecanismos de participación más directa de los socios en las problemáticas concretas, aparecen como demandas principales.
Las investigaciones continúan y seguiremos expectantes ante una coyuntura que cambia minuto a minuto, no sólo por la investigación del FBI sino por los reacomodamientos de este temblor internacional, con repercusión directa en el fútbol argentino, que ya comenzó la rosca para definir en octubre el nuevo Presidente de AFA.
Como decía Einstein: “Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos nuestro talento y nuestras habilidades para encontrar soluciones, acabemos de una sola vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla”.
Y miles de hinchas de clubes pertenecientes a todas las categorías del fútbol argentino, no quieren que esta crisis de representatividad pase por el costado sin consecuencias.
Artículo publicado originalmente en el blog del autor (https://deportecontexto.wordpress.com).
